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El BBVA rechaza cambiar retroactivamente las hipotecas

Francisco González insiste en que sin confianza y seguridad jurídica se contraería aún más la concesión de créditos.

punt dijo el día 17 de Junio de 2011 a las 16:46:

Parece que no sale, reenvío:

En este terreno ya se han promulgado al menos dos leyes retroactivas, y en ambos casos quien las ha perpetrado ha sido este gobierno zetaperro socialista:

1.- Creo que fue en noviembre de 2006, se decretó que desaparecía buena parte de la desgravación por la compra de primera vivienda (la desgravación adicional que aplicaba sólo a los dos primeros años desde la compra), lo cual afectó a todos los que compraron su casa desde febrero del mismo año (los anteriores al 30 de enero no se vieron afectados). Es decir, la medida afectó retroactivamente a todos aquellos que compraron su vivienda entre febrero y noviembre de 2006, contando con unas desgravaciones en el momento de la firma que se esfumaron ilegalmente por el efecto retroactivo de una ley injusta.

2.- Creo que más o menos por las mismas fechas, ese malhadado gobierno socialista del PSOE promulgó una modificación a la ley hipotecaria por la que se permitía a los bancos realizar, sin la autorización del dueño, una nueva tasación de cualquier inmueble y, caso de suceder que el valor de mercado hubiese caído por debajo del capital pendiente de amortizar, les concedía el derecho a exigir garantías adicionales no descritas en el contrato hipotecario firmado por ambas partes, consistentes bien en el pago en metálico de la diferencia, o bien en la aportación de nuevos bienes a hipotecar o nuevos avales.

La verdad, juraría que estos dos cambios son, exactamente, "cambiar retroactivamente las hipotecas". Pero claro, supongo que para el BBVA no cuentan porque el perjudicado en estos casos no es el banco sino el cliente.

Un saludo.

pablocj dijo el día 16 de Junio de 2011 a las 18:55:

evidentemente. A mí todas las leyes retroactivas siempre me han parecido muy injustas, porque en el momento del contrato había unas condiciones que ambas partes aceptaban.