La confianza de los consumidores en la evolución de la economía de Estados Unidos y de su situación financiera personal disminuyó en junio más de lo calculado inicialmente, según los datos difundidos hoy por la Universidad de Michigan.
Según cifras finales relativas a junio, el índice que elabora esa institución a partir de encuestas se situó el mes pasado en 71,5 puntos, por debajo de los 71,8 puntos en los que se situó en el cálculo preliminar de esa institución.
El dato quedó por debajo también del registrado el mes precedente, cuando el índice que mide la confianza de los consumidores se colocó en 74,3 puntos, al tiempo que en junio del año pasado ese indicador se situaba en 76 puntos, informa EFE.
El descenso del mes pasado se produce después de que la confianza de los consumidores repuntara en mayo hasta su nivel más alto en tres meses gracias al abaratamiento del crudo y otras materias primas, tras las contundentes subidas desde el inicio de la ola de protestas en el mundo árabe.
Según la Universidad de Michigan, el descenso de junio en la confianza de los consumidores se debió a las renovadas preocupaciones sobre los pronósticos de la economía estadounidense, aunque el abaratamiento del combustible estabilizó la valoración de los consumidores de sus condiciones actuales.
Así el subíndice que mide la sensación actual de los consumidores sobre su situación financiera y su disposición a realizar grandes compras subió desde los 81,9 puntos de mayo hasta los 82 del mes pasado, por encima del cálculo preliminar de esta institución, que lo había situado en 79,6 puntos.
Por contra, el indicador que mide las expectativas de los consumidores sobre cómo estará la economía en un plazo de medio año cayó en junio hasta los 64,8 puntos, desde los 69,5 de mayo y muy por debajo de los 66,8 puntos del cálculo preliminar.
"Aunque esperamos que en la segunda mitad de 2011 veamos aumentos en el gasto de los consumidores, la tendencia general probablemente variará entre pobre y cero, más que entre pobre y robusto", dijo al publicarse esos datos el director de este sondeo, Richard Curtin, quien añadió que "no se ve en el horizonte un resurgir del gasto".