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Montoro aprueba un nuevo 'sablazo fiscal' de 5.400 millones al año

El Gobierno sube los impuestos sobre las empresas, alcohol, tabaco, viviendas, aerosoles y aires acondicionados. Y prevé gastar más dinero en 2014.

El Gobierno sube los impuestos sobre las empresas, alcohol, tabaco, viviendas, aerosoles y aires acondicionados. Y prevé gastar más dinero en 2014.

El Gobierno mantiene intacta su política fiscal, consistente en aumentar los impuestos de forma continuada y constante. En esta ocasión, el Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio de hacienda que dirige Cristóbal Montoro, ha aprobado este viernes una fuerte subida tributaria sobre las empresas, los consumidores de alcohol y tabaco y los propietarios de vivienda, aparte de crear una nueva tasa medioambiental que afecta a determinados productos y que, finalmente, será sufragada por los consumidores. En definitiva, un nuevo golpe fiscal a familias y empresas para recaudar unos 5.400 millones de euros extra al año.

Además, lejos de restringir el presupuesto, el Gobierno ha optado por elevar el techo de gasto en 2014, es decir, el límite máximo que, en teoría, no podrán superar los gastos no financieros del Estado el próximo año. Se trata del primer paso para aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2014. En concreto, el Gobierno prevé gastar unos 6.500 millones de euros más que el techo de gasto aprobado inicialmente para 2013. Esto prueba la ausencia de austeridad presupuestaria por parte del Ejecutivo del PP.

Sociedades: 3.650 millones, como mínimo

En materia de impuestos destaca, sobre todo, la subida aplicada a las empresas a través de la eliminación de deducciones fiscales en el Impuesto de Sociedades. Montoro pretende elevar la base imponible de dicho impuesto impidiendo que las empresas se puedan deducir las pérdidas derivadas del deterioro de su participación en el capital o fondos propios de otras entidades, cotizadas y no cotizadas (acciones o participaciones en otras empresas, etc.). Esta medida tendrá una mayor incidencia en las grandes empresas, que son las que tienen participaciones significativas en otras compañías radicadas en España o en el extranjero. "En consecuencia, se considera gasto no deducible las rentas negativas obtenidas en el extranjero a través de un establecimiento permanente", indica la referencia del Consejo de Ministros. Sólo con esta medida, Montoro espera recaudar 3.650 millones de euros extra al año.

Pero es que, además, el Gobierno también prorroga para 2014 y 2015 las "medidas temporales" que aprobó en 2012 para incrementar el pago fraccionado mínimo del 12% para grandes empresas (facturación superior a 20 millones), así como para limitar la compensación de bases imponibles negativas y la deducibilidad del fondo de comercio. Todo ello tiene por objetivo elevar la tributación de las empresas y que éstas incrementen el volumen de pagos adelantados.

La recaudación por el Impuesto de Sociedades (IS) ascendió a 21.400 millones el pasado año, y Hacienda preveía ingresar otros 19.000 millones este ejercicio. Sin embargo, el desplome de los beneficios empresariales en 2012, sobre todo de las grandes compañías, ha sido muy superior a lo previsto. Las ganancias de las cotizadas del Ibex 35 se hundieron un 56% interanual. Esta caída amenazaba con reducir la recaudación por IS calculada por Montoro, de ahí que haya optado por disparar aún más la fiscalidad, eliminando deducciones, y prorrogar el pago adelantado de impuestos para que el Estado siga recibiendo su parte. Tal decisión supondrá un fuerte impacto sobre las cuentas de las grandes compañías, que, pese al duro golpe de la crisis, siguen manteniendo cientos de miles de puestos de trabajo en España.

Montoro se escuda en que, pese a que el tipo general del IS es del 30%, las grandes empresas pagan un tipo muy inferior gracias a estas deducciones. El ministro, sin embargo, parece olvidar que España cuenta con uno de los Impuestos de Sociedades más elevados del mundo y que la tendencia en las últimas décadas entre las economías desarrolladas y emergentes ha sido, precisamente, reducir esta tributación con el fin de atraer multinacionales e inversión foránea.

Impuestos Especiales: 700 millones

El Gobierno del PP también ha subido este viernes los Impuestos Especiales sobre tabaco y alcohol para recaudar 700 millones extra al año. El impuesto que grava el consumo de alcohol subirá un 10%, pasando de 8,30 euros por litro de alcohol a 9,13 euros, aunque no afectará ni al vino ni a la cerveza. Hacienda se escuda en que los tipos impositivos que gravan el alcohol se encuentran dentro de los más bajos de la UE y la última subida de tipos se produjo en 2005. En realidad, hoy por hoy, antes de aplicar esta subida, el Estado se bebe más del 40% del precio de cada botella.

Fuente: @Absolutexe

Igualmente, se eleva la fiscalidad del tabaco por cuarta vez desde que llegó al poder Mariano Rajoy. El Gobierno espera recaudar 366 millones al año. En este caso, y antes de aplicar esta nueva subida, el Estado se fuma ya hasta el 83% del precio de cada cajetilla.

En el caso de los Impuestos Especiales, Montoro ha argumentado, además, que de este modo se limitan las "externalidades negativas" que se derivan del consumo de estos productos. Es decir, que el Estado sube los impuestos por nuestro bien y no para recaudar más, según el ministro.

Nueva tasa verde: 340 millones

Se trata de una excusa similar a la de las tasas verdes. Así, el Gobierno ha creado un nuevo impuesto sobre los gases fluorados de efecto invernadero (aerosoles y aires acondicionados), que pagarán los fabricantes e importadores y adquirientes de estos productos. "Se crea siguiendo las recomendaciones de la UE para avanzar en imposición medioambiental", se justifica el Gobierno. Prevé recaudar 340 millones de euros en un año, entrará en vigor en 2014 y el tipo impositivo en este caso se establecerá en función del potencial de calentamiento atmosférico (PCA) de los productos gravados.

Impuesto de Bienes Inmuebles: 700 millones

Por último, el Gobierno ha decidido prorrogar el gravamen complementario que aplicó al Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) durante 2014 y 2015 ante la situación de superávit de los ayuntamientos, lo que reportará a las arcas del Estado unos 700 millones al año. Fuentes de Hacienda han explicado que el gravamen complementario diseñado para 2013 ya fue prorrogado para el 2014 y ahora el Gobierno ha decidido ampliar dicha prórroga un año más ante la situación de saneamiento de las entidades locales.

Así pues, con todas estas medidas, Hacienda espera recaudar unos 5.400 millones de euros extra al año, como mínimo. El Gobierno prevé ingresar unos 1.000 millones adicionales sólo en 2013, la mayor parte procedentes de la eliminación de deducciones en el Impuesto sobre Sociedades.

Más gasto público en 2014: 6.467 millones extra

Lo curioso es que estas subidas fiscales no irán acompañadas de nuevas medidas de austeridad pública, ni mucho menos, sino todo lo contrario. El Gobierno aprovechará el mayor margen de déficit otorgado por Bruselas para incrementar el gasto el próximo año. El techo de gasto en los PGE de 2014 ascenderá a 133.259 millones de euros, un 2,7% más que el límite no financiero de 2013. Sin embargo, cabe recordar que el primer techo de gasto aprobado por el PP fijaba este umbral en 126.792 millones de euros. Así pues, el Gobierno ha elevado en casi 6.500 millones (un 5% más) el límite de gasto no financiero para 2014 en comparación con su objetivo inicial de 2013.

La ausencia de austeridad se comprueba también al observar los nuevos objetivos de déficit público de aquí a 2016. El límite inicial en los PGE de 2013 era reducir la brecha fiscal hasta el 4,5% del PIB, para luego situarla en el 2,8% en 2014.

El cuadro que ahora se pretende incluir en los PGE de 2014 fija el objetivo de déficit en el 6,5% este año y en el 5,8% el que viene.

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