La eurodiputada de Podemos, Teresa Rodríguez, ha asegurado, tras la presentación del programa económico del partido, que urge una reforma agraria para Andalucía con la finalidad de alcanzar "un reparto más equitativo de la tierra".
La cuestión es que el grupo que lidera Teresa Rodríguez dentro de Podemos no tiene la mayoría y el jueves, en la presentación de las líneas generalísimas del programa económico, no hubo mención alguna a una reforma agraria. Vuelve así a la actualidad una reforma agraria que el PSOE defendió en 1982 y que provocó, como es sabido, la caída del presidente Rafael Escuredo en 1984.
Rodríguez ha sostenido esto tras la presentación del programa económico que esbozó apenas el líder de la formación, Pablo Iglesias, en el que plantea que la banca pública reactive el crédito a las familias, un aumento de los salarios a través de un fortalecimiento de los sindicatos, reducir la jornada laboral a 35 horas semanales y subir las pensiones.
Rodríguez ha subrayado que si bien son "urgentes" y "necesarias" las políticas económicas planteadas en dicho programa, también lo es una reforma agraria para Andalucía. En este sentido, recordó que "en Andalucía tenemos una situación insostenible con un 35,2% de paro", por lo que el documento plantea "cosas de sentido común como la derogación de la reforma laboral, que no ha servido para crear empleo sino sólo para aumentar la desigualdad, las 35 horas o la jubilación a los 65 años".
La eurodiputada gaditana puso el acento en que, "como andaluza", echa en falta en dicho plan "una reivindicación histórica en mi región como un reparto más equitativo de la tierra", para lo que considera urgente "una reforma agraria, que implica un reparto más equitativo de la tierra [...] "Queremos una agricultura de campesinos y avanzar hacia un sistema más igualitario y sostenible".
Tras proponer completar estas propuestas con medidas como "la prohibición de despidos en empresas con beneficios", Rodríguez señaló que estas políticas económicas "no sólo son urgentes y necesarias, sino que la verdadera revolución democrática consiste en que sea la propia gente la que las decida y aplique", por lo que ha señalado que "este documento es la base sobre la que se debatirá colectivamente mediante un proceso colaborativo".
El objetivo de Podemos es "garantizar el ejercicio del derecho al trabajo que reconoce nuestra Constitución, es decir, trabajar menos para trabajar todos", defendió Rodríguez. Además, señaló que "el dinero público debe destinarse únicamente a financiar servicios cuya gestión también lo sea".
El grupo promotor de Podemos lo conformaban principalmente la gente del programa La Tuerka y el entorno de Pablo Iglesias e Izquierda Anticapitalista, de orientación trotskista. Aunque sus relaciones han sido siempre complejas, el enfrentamiento llegó con la elección del equipo de Pablo Iglesias, que marginó de la dirección a Izquierda Anticapitalista, grupo al que pertenece Teresa Rodríguez.