Con la época estival llegan las vacaciones, los viajes, las escapadas de fin de semana o las visitas a la costa y con todo ello, los robos en viviendas, una de las cuestiones que preocupan a los propietarios a la hora de abandonar temporalmente sus casas.
A pesar de que cuando las temperaturas suben, los asaltos a hogares suelen aumentar, el número de robos con fuerza en domicilios ha descendido un 15,9% en el primer trimestre de este año, según datos del Balance de Criminalidad elaborado por el Ministerio del Interior. De este modo, se ha pasado de 32.762 asaltos de enero a marzo del 2014 a 27.539 robos en el mismo periodo de tiempo de 2015. Además, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) existen 18.252.887 hogares en España, por lo que se produce 1 robo por cada 662 viviendas.
Consejos para evitar asaltos
Aunque los allanamientos de hogares hayan caído este año, es importante que se sigan tomando precauciones a la hora de proteger el hogar de la amenaza de los cacos en vacaciones. Según la Unión de Cerrajeros de Seguridad (UCES), la mayoría de los robos en casas se producen cuando los habitantes de la vivienda se encuentran realizando un desplazamiento de corta duración. En concreto, 4 de cada 10 allanamientos se cometen cuando se abandona entre 1 y 3 días el domicilio.
Puertas y ventanas cerradas
Si los habitantes de una casa van a pasar unos días fuera, lo mejor es que cierren bien todos los puntos de entrada a la vivienda, siempre con llave. Según el Ministerio del Interior, hay que procurar que la puerta tenga "al menos dos puntos de cierre" ya que llevará más tiempo abrirla y el ladrón "puede desistir". "Para evitar que la apalanquen, se debe reforzar la parte de las bisagras de la puerta con pivotes de acero y ángulos metálicos, además, hay que revisar que no exista hueco entre la puerta y el suelo".
En este punto, Mapfre insiste en que es conveniente invertir en puertas y ventanas. "En caso de que no puedas permitírtelo, al menos céntrate en aquellas posibles entradas más vulnerables, como zonas traseras, arboladas o de fácil acceso". Las ventanas que dan a patios son puntos "especialmente desprotegidos por estar ocultas a la vista", por lo que es recomendable asegurarlas con rejas.
No publiques tus vacaciones
El destino, la duración o el hotel de tus vacaciones son detalles que es mejor no publicar en las redes sociales, ya que los ladrones pueden obtener datos precisos para saber cuándo y cómo cometer el robo en la vivienda. Además, el Ministerio del Interior también advierte de que tampoco se comenten los planes de viajes y que se vigile a los niños de la familia para que no indiquen datos del viaje a otros niños o gente de su entorno.
Movimiento en la vivienda
Una vivienda con movimiento para que parezca que esté habitada puede ser un buen método disuasorio para los ladrones. Para ello, el Grupo Zurich propone dejar las persianas a medio bajar. "Lo óptimo es instalar un temporizador que las suba y las baje de vez en cuando para que parezca que hay gente dentro y despistar así a los ladrones", indican. Además, también explican que puede ser beneficioso pedirle a un amigo o familiar que se pase de vez en cuando a regar las plantas para evitar dejar la casa tanto tiempo sola.
Antes de salir de casa
Comprobar que todas las protecciones de casa funcionan es esencial ante un posible robo. El Grupo Zurich aconseja también revisar alarmas, rejas, cerraduras de seguridad, etc. Además, indica que es prioridad arreglar lo que no está en buen estado.
Los objetos de valor pueden ser guardados en una caja de seguridad, e incluso la policía aconseja que se realice un inventario con los números de serie de aparatos electrónicos, marca y modelos, para en caso de robo poderlos reclamar.
Por otro lado, es importante no dejar ninguna llave escondida en puntos clave como macetas, bajo de la alfombra o el buzón.
Qué hacer si roban en una vivienda
Lo primero que hay que hacer cuando se descubre un robo es llamar a la Policía o Guardia Civil. Si se sorprendiese a un ladrón en pleno robo, no se debe hacerle frente, ya que el ladrón podría utilizar la violencia o incluso tomar al propietario como rehén para que indique dónde están los objetos de valor.
En este caso, El Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) aconseja a los propietarios que traten de recordar todos los detalles del caco para poderlos contar después a la policía. "Cosas como el color del pelo, rasgos diferenciales, alguna marca o tatuaje, la ropa, el acento o alguna cosa que diga pueden ser decisivos para identificar al intruso o intrusos y que la investigación concluya con éxito", indican.
También puede ser primordial el fijarse, sin correr riesgos, en la dirección en la que huye el ladrón. "Si lo hace en un vehículo y se puede ver, es importante tratar de identificar y apuntar todo lo que se pueda", apuntan desde RACC.
No tocar nada y anotar lo sustraído
Cuando se produce un robo, no se debe tocar ningún objeto, todo se debe dejar como se encontró hasta que la policía llegue. Una vez la policía da su permiso para tener libre acceso a la casa, se puede realizar un inventario de todo lo robado.
Por otro lado, si después de realizar la inspección a la casa, se echan en falta tarjetas de crédito o libros de cheques, se debe de llamar inmediatamente al banco para que anule lo que sea necesario. Lo mismo ocurre con soportes digitales o electrónicos que puedan contener información relevante sobre datos financieros.
Avisar a la aseguradora
Los propietarios de viviendas que hayan sido asaltadas y tengan un seguro del hogar tienen que ponerse en contacto con su aseguradora para dar parte del robo. Según Fernando Summers, director de producto de Rastreator.com, si se dispone de facturas o documentos que acrediten lo que falta, se deben incluir también en el inventario, ya que pueden ser "de gran utilidad" para las compañías a la hora de indemnizar.
Summers indica que "lo normal es que se pueda reclamar sobre los objetos robados o dañados (contenido) y sobre los daños en la propia vivienda (continente), como ventanas rotas o puertas forzadas".
Revisar el seguro
El propietario de una vivienda que tenga contratado un seguro del hogar debe ser consciente de las coberturas que incluye su póliza. Es importante que a la hora de contratarlo sepa qué es lo que queda fuera en caso de robo, ya que si éste se produjese, sería esencial tener conocimiento de ello a la hora de reclamar.
Por este motivo, es muy importante que antes de contratar una póliza se revisen las cláusulas y se comparen varias aseguradoras. De este modo, se llega a tener una visión global de las coberturas que tienen distintas compañías de seguros frente a siniestros y robos en el hogar.