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¿Qué pasará en 2017? Ya están aquí las predicciones de la revista 'Fortune'

Las nuevas joyas de Silicon Valley saldrán a Bolsa, Trump aprobará grandes reformas fiscales, el populismo irá en auge...

Cada año, cuando llega el mes de diciembre, los analistas de la revista Fortune sacan brillo a su bola de cristal y publican sus predicciones sobre el rumbo que seguirá la economía a lo largo del próximo curso.

Tecnología

De cara a 2017, estos son algunos de los grandes adelantos que espera Fortune en el ámbito tecnológico:

1. Tecno-futurismo.

Seguiremos avanzando hacia una vida más cómoda, gracias a los avances tecnológicos. Recibir todo tipo de servicios a domicilio, disfrutar mejores experiencias de realidad virtual, acceder a productos conectados continuamente a internet… son algunos de los cambios a mejor que experimentaremos en 2017.

​​​​​​​2. ​​​​​​​Las nuevas joyas de Silicon Valley salen a Bolsa.

Snapchat, Palantir, Uber… Muchas empresas tecnológicas podrían animarse a salir a Bolsa a lo largo de 2017. La más conocida en España es Snapchat, el servicio de mensajes instantáneos que le ha desplazado a WhatsApp entre importantes segmentos de la población juvenil. La más desconocida es Palantir, una firma de big data con especial fuerza en el plano financiero. Y la más controvertida es Uber, que ofrece una alternativa al taxi pero ha chocado en España con todo tipo de restricciones regulatorias.

3. Salto adelante para los teléfonos inteligentes.

El iPhone 7 no ha supuesto un gran salto adelante, pero 2017 podría suponer un antes y un después para el dispositivo estrella de Apple, que cumplirá diez años durante el próximo curso. Se habla de una pantalla que cubrirá toda la superficie, de la eliminación de los botones manuales, de la incorporación de la carga inalámbrica, de la adopción de pantallas OLED…

4. Drones en la puerta de casa.

Son cada vez más las empresas interesadas en incorporar drones para mejorar su sistema de reparto a domicilio. Empresas como Amazon o Domino’s han hecho ya sus primeras pruebas con éxito. El resultado parece haber convencido a los directivos de ambas firmas, por lo que la pelota está ahora en el tejado de los reguladores.

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5. La economía colaborativa seguirá avanzando.

Hasta ahora, el crecimiento de aplicaciones como Airbnb estaba ligado a las grandes capitales. Sin embargo, 2017 será el año de la democratización de estas plataformas, ya que cada vez habrá más usuarios en ciudades de tamaño medio. En EEUU, consolidado el boom en las grandes metrópolis del país, se observa ya un fuerte aumento en mercados como Phoenix, Denver, Dallas…

Política y mercados

En el plano político, Fortune se centra en EEUU y espera las siguientes dinámicas en 2017:

1. Desregulación medioambiental.

Durante los últimos años, el gobierno federal de EEUU ha implementado medidas restrictivas con las empresas que se justifican por la necesidad de luchar contra el cambio climático. Con Donald Trump puede ocurrir todo lo contrario y el Ejecutivo se lanzaría a impulsar un nuevo marco regulatorio con menos restricciones y una actitud más favorable hacia los segmentos del sector energético más castigados por la Administración Obama (petróleo, gas, nuclear…).

2. Reforma fiscal.

Desde los años 80, el Impuesto de Sociedades apenas ha sido modificado y el Impuesto sobre la Renta ha acumulado numerosos parches que deben ser modificados cada cierto tiempo. Fortune cree que 2017 será un año interesante a la hora de desarrollar una reforma tributaria duradera, concentrada en bajar los impuestos a las empresas y las familias.

3. Crecimiento por encima del 2%.

En 2016, Estados Unidos va a experimentar un crecimiento anémico, situado en el entorno del 1,5%. Sin embargo, en 2017 podemos anticipar una aceleración del PIB superior al 2%. Fortune apunta que la OCDE, el FMI y The Economist ya han señalado que el crecimiento podría superar el 2,2% durante el próximo año, por lo que esta predicción se antoja especialmente realista.

4. Progreso y resentimiento.

En clave mundial, la pobreza seguirá bajando y las economías menos prósperas seguirán avanzando, pero el resentimiento socioeconómico irá en aumento en el mundo rico, dando pie a un alarmante repunte de la incertidumbre política, el populismo, el proteccionismo y el nacionalismo.

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