Menú

La OCDE pide subir el IVA, más impuestos verdes y eliminar deducciones en el IRPF

El organismo presenta su informe sobre la economía española y señala cinco áreas de mejora: fiscalidad, productividad, gasto público, PAE y educación.

El organismo presenta su informe sobre la economía española y señala cinco áreas de mejora: fiscalidad, productividad, gasto público, PAE y educación.
Ángel Gurría, secretario general de la OCDE, este martes, en Madrid, junto a Luis de Guindos. | EFE

"Hay que reformar las reformas". Con esta frase, Ángel Gurría presentaba este martes por la mañana en Madrid el informe sobre la economía española que ha realizado la institución que preside, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). En una rueda de prensa a la que acudía también Luis de Guindos, el mexicano desgranaba los retos que, en su opinión, tiene por delante nuestro país para los próximos años.

No ha habido sorpresas. Las recetas del Economic Review 2017 Spain son muy parecidas a las que en los últimos años han realizado la Comisión Europea, el FMI o la propia OCDE. Casi todo sonaba a ya escuchado. Desde que en la primera mitad de 2012 el Gobierno español aprobara las tres grandes reformas que definieron la primera legislatura de Mariano Rajoy (rescate del sistema financiero, reforma laboral y las primeras medidas para reducir el déficit público) los informes de los organismos internacionales son muy parecidos. Todos dicen más o menos lo mismo, sobre el pasado, el presente y el futuro.

Respecto a lo ya hecho, prevalecen las alabanzas. Se elogia al Gobierno por la reforma laboral de 2012, se aplaude la forma en la que se rescató a las cajas y se valora de forma positiva la tendencia de reducción del déficit que, aunque muy alejado de los compromisos alcanzados con Bruselas, ha pasado del 10-11% de 2010 y 2011 al 4,6% que está previsto que marque el cierre definitivo de 2016.

En lo que hace referencia al presente, también el panorama es optimista. España es una de las economías desarrolladas que más creció en los últimos dos años y seguirá siéndolo en los próximos ejercicios. El resumen de las previsiones de la OCDE puede verse en el siguiente cuadro: España crecerá al 2,5% en 2017 y al 2,2% en 2018, una tasa más reducida que en años anteriores, pero todavía entre las más elevadas de la UE. El paro bajará al 16% para finales de 2018, pero la deuda pública seguirá estando alrededor del 99%.

OCDE_previsiones_2017_spain.JPG
OCDE

Y en relación con el futuro, pues también se mantienen las constantes. Resulta complicado destacar algo que no se haya dicho ya. También llama la atención la complacencia de la institución que publique el informe con el Gobierno español. Porque año tras año se mantienen las recetas. Y año tras año el Ejecutivo de Mariano Rajoy hace oídos sordos. Parece claro, tras todo este tiempo, que en Moncloa no creen que las propuestas que les hace la CE, la OCDE o el FMI sean las que la economía española necesita. O al menos no sienten la urgencia de aprobarlas.

Quizás por eso, en la rueda de prensa, Gurría ha sido muy enfático con la necesidad de mantener el rumbo y seguir avanzando". "España es la prueba de que las reformas funcionan", ha dicho. Eso sí, también ha añadido que "hay que reformar las reformas", es decir, mantener adaptarse a los cambios en el exterior y mejorar todo lo que haya que mejorar: "Sería injusto no reconocer lo realizado, pero sin perder de vista la otra parte, los retos. Si uno deja de pedalear, se cae. El tema de las reformas tiene que ser un estado de ánimo, aún más, tiene que ser una forma de vida. Además, la reforma que vale uno tiene como resultado uno: pero si a ésa le agregas una más, juntas no valen dos, valen cinco".

Las propuestas

A pesar de todo, este martes Gurría y De Guindos se lanzaban elogios mutuos, uno a la actitud reformista del Gobierno y el otro a la calidad del informe presentado. La pregunta ahora es si esos elogios se transformarán en algo más concreto. Los siguientes son los cinco campos en los que la OCDE ha hecho más hincapié y las reformas que pide en cada uno de ellos:

- Impuestos: en materia fiscal, la OCDE cree que hay que cambiar el peso de las diferentes categorías impositivas. Su apuesta es subir los impuestos indirectos, sobre todo IVA y los tributos medioambientales, para reducir el peso de los impuestos directos (IRPF, Sociedades, Cotizaciones) en el mix tributario. Por cierto, que casi todo lo incluido en este capítulo ya estaba en las recomendaciones de 2012 y de 2014.

De lo que España recauda en total, el 62% llega de sus impuestos sobre el trabajo y el 24,4% en los impuestos indirectos sobre el consumo y el medioambiente. En los países de la OCDE, las cifras medias son del 60% y el 27% respectivamente. Por ahí apuntan los autores del informe que debe ir la próxima reforma fiscal. Subir IVA e impuestos verdes a cambio de no subir los tipos en IRPF o Sociedades. En ocasiones anteriores, además, la OCDE ha abierto la puerta a posibles rebajas generalizadas de las cotizaciones. Ahora lo circunscribe a los nuevos contratos fijos, que piden que estén bonificados de forma permanente si van dirigidos a empleados de baja cualificación (y no sólo los dos primeros años, como en la actualidad). La presión en el gasto sobre las pensiones parece que ha disuadido a los autores de mantener aquella reivindicación más general sobre las cotizaciones.

Eso sí, aunque es cierto que pide reducir el peso de la tributación sobre el empleo, en lo que hace referencia al IRPF, aunque como decimos no apuesta por incrementar los tipos, la OCDE sí pide "abolir las exenciones del IRPF con un enfoque inadecuado".

OCDE_2017_spain_IVA.JPG
OCDE

- Empleo: aquí llega otra de las novedades (no tanto por lo que entra, como por lo que sale del informe) de las recomendaciones de la OCDE. El contrato único que la OCDE proponía en 2012 ya no aparece en las recomendaciones destacadas, aunque sí está en el cuadro resumen sobre los retos pendientes de la reforma laboral que se incluye en el informe.

En su lugar, la OCDE vuelve a otro de sus clásicos: la formación a los parados. Como puede verse en el siguiente gráfico, España es uno de los países que menos gasta (medido en gasto por desempleado) en este aspecto y la OCDE pide que esto cambie. Sus recomendaciones para activar a los parados, sobre todo los de larga duración, van desde la creación de perfiles individualizados de cada desempleado y la posible contratación de consultores especializados por parte de los servicios públicos, hasta el aumento de los recursos de estos mismos servicios. Tratamiento individualizado y gastar más en prevención y atención inmediata al desempleado en vez de centrarlo todo en los subsidios como hasta ahora: también son dos consejos habituales en casi todos los informes sobre la economía española.

OCDE_2017_spain_parados.JPG
OCDE

- Educación y formación: otro aspecto a mejorar, en opinión de los autores, es el que tiene que ver con la cualificación de la fuerza laboral. Para ello, se dirigen tanto a la escuela como a la formación de los trabajadores.

En lo que tiene que ver con el sistema educativo, la OCDE recuerda que España tiene peores notas en PISA que la media de los países ricos (y con una elevada disparidad entre las regiones). Además, lideremos el ránking europeo de abandono escolar, con un 20% de jóvenes que no siguen más allá de la educación obligatoria. Y esto se traduce en uno de los porcentajes más elevados de la OCDE de personas de entre 25 y 64 años que no tiene un título de educación secundaria superior (bachillerato o su equivalente en FP), el nivel que se considera mínimo para acceder con garantías al mercado laboral. Si a esto además se le añade que luego en el puesto de trabajo también estamos entre los países que menos gastan en formación (algo en lo que tiene mucha importancia el elevado empleo temporal), la combinación es letal.

OCDE_2017_spain_abandono_escolar.JPG
OCDE

Para solucionarlo, la OCDE pide "mejorar la calidad del profesorado", con mejor formación universitaria y un mejor sistema de selección. Además, también proponen más "programas de apoyo laboral" e "incentivos" para el desarrollo profesional.

En lo que hace referencia a la formación más relacionada con el empleo, la OCDE pide impulsar la FP Dual y también "potenciar los programas de formación para adultos".

- Productividad: el gran problema de la economía española es la baja productividad. La falta de empleo, los bajos salarios, la carencia de grandes empresas… todos estos factores son causa y consecuencia de nuestra incapacidad para ser más productivos, generar nuevos productos o competir en el mercado internacional. Como apuntamos, no es una relación de una sola dirección: las empresas pequeñas son poco productivas y como la economía en su conjunto no consigue despegar es más difícil que esas pequeñas empresas crezcan.

Para solucionarlo, la OCDE vuelve a rescatar el recetario clásico. Aquí sí hay unanimidad. En cualquier informe de la Comisión o el FMI se pueden encontrar propuestas casi calcadas a las que este martes ha hecho Gurría. También aquí son medidas que llevan más de un lustro encima de la mesa. Van desde la implantación real de la Ley de Unidad de Mercado a la eterna reforma de los servicios profesionales: España es uno de los países con una normativa sobre servicios más rígida y con más barreras de entrada. También en materia de regulación empresarial y liberalizaciones hay "margen", ha asegurado Gurría, a pesar de las mejoras de los últimos años.

Por otro lado, la OCDE pide más fondos para la I+D y facilidades para que ésta llegue al sector privado (Gurría destacaba en la rueda de prensa que las empresas españolas no llegan al 0,7% del PIB en gasto en I+D mientras las coreanas rozan el 3,5%). En este capítulo también se incluyen las medidas para facilitar la segunda oportunidad tras la quiebra, los planes de impulso a las pymes para que aquellas más innovadoras puedan crecer y los programas de financiación público-privados para nuevas empresas.

OCDE_2017_spain_IDi.JPG
OCDE

- Lucha contra la pobreza: el último gran capítulo del informe es el dedicado a la lucha contra la pobreza. Aquí España tiene un problema en términos absolutos (es uno de los países más castigados por la crisis) pero también por la falta de efectividad de nuestras políticas públicas. Es otro clásico en las recomendaciones de los organismos internacionales, el gasto destinado a reducir las situaciones de dificultad no se realiza de forma demasiado efectiva. Las transferencias destinadas al decil de hogares con menos ingreso están entre las más bajas de la OCDE. Por eso, los autores del informe piden mejorar en esta cuestión, aumentar el volumen de los programas de ayuda (y, sobre todo, dirigir bien ésta) e incrementar las transferencias en efectivo para las familias con hijos.

OCDE_2017_spain_transferencias.JPG
OCDE

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios