A principios de semana, esta divisa llegó a rozar el mínimo absoluto de 0,8443 dólares alcanzado del pasado 20 de septiembre, pero este miércoles, hacia las 09.00 horas GMT, se pagaba a 0,8547 dólares.
Los rumores sobre la dimisión del banquero holandés surgieron ayer, tras ser duramente criticado por declarar en una entrevista que el banco europeo no pensaba intervenir en los mercados para apoyar al euro si éste se desploma por el conflicto de Oriente Medio.
Los mercados se centran ahora en la reunión del Consejo de Gobierno del BCE de mañana, jueves, en París, de la que no se esperan modificaciones de los tipos de interés, que desde el 5 de octubre pasado están en el 4,75 por ciento.
Sin embargo, los analistas esperan otro incremento de las tasas antes de terminar el año por la espiral de los precios del petróleo y la debilidad del euro, que ha acrecentado los temores inflacionistas.
La inflación media en los once países del euro para septiembre subió hasta el 2,8 por ciento, la cifra más alta desde que se estrenó el euro en enero de 1999.