L D Tanto españoles como italianos, belgas, austriacos y finlandeses, han mostrado una misma curiosidad por estas nuevas monedas, que no podrán ser utilizadas hasta el próximo 1 de enero, dentro de 16 días. Este éxito ha tomado por sorpresa incluso a las autoridades monetarias. En la mayoría de los países europeos donde se han puesto a la venta los euromonederos los bancos cierran los sábados, por lo que se han usado otros canales de distribución, que sin embargo se han quedado muy cortos de euros.
Las oficinas de correos en Italia, las estaciones de servicio en Austria, los kioskos en Finlandia, y algunas estaciones en Bélgica, así como en España las sucursales bancarias abiertas, fueron asaltadas por los compradores desde primeras horas de la mañana. Pero estos monederos no sólo son diferentes por su vía de distribución, sino que también lo son por su variada composición. En Finlandia cada euromonedero está compuesto por 3,88 euros, y en Italia, por 12,91 euros, todo con el objetivo de venderlos por una cifra redonda en la moneda local.
Regalo de Navidad
En muchos países europeos, estos euromonederos están considerados como un regalo de Navidad perfecto. Incluso los 15 dirigentes de la Unión Europea reunidos en el Consejo de Laeken han recibido sus primeros euros.
El próximo lunes, sin embargo, la moneda única tendrá una nueva prueba en Alemania, el país más escéptico hacia la moneda única, con la venta de los primeros euromonederos . Este viernes, un sondeo mostraba un cambio de actitud de los alemanes hacia la nueva moneda, hasta el punto de que algunos temen que no haya existencias suficientes. Las autoridades europeas confían en que, con esta medida, los euros entrarán antes en la vida de los ciudadanos, quince días antes de su puesta en circulación, lo que facilitará el cambio de moneda, el próximo 1 de enero.
En España, las entidades financieras que han abierto sus puertas, principalmente los bancos, se han convertido en una parada obligada para los ciudadanos que han desafiado el frío reinante en España y que han salido a la calle a comprar sus primeros euros, en los conocidos euromonederos . Tanto los bancos como las cajas han destacado el gran interés del público por la nueva moneda y, aunque en pocos casos se han llegado a producir grandes colas ante las ventanillas, lo que sí se ha producido es una mayor afluencia de público que en una jornada normal de sábado.
El propio secretario de Estado de Economía, José Folgado, que se ha acercado a una sucursal del BBVA en Madrid para adquirir su euromonedero , ha destacado la jornada de este sábado como un día histórico, ya que por primera vez los ciudadanos podrán “visualizar y tocar” las monedas de euro.
La nueva moneda europea se distribuye en un paquete de 43 piezas que suman 12,02 euros (2.000 pesetas). Las 43 monedas euro están recogidas en una bolsa transparente de 215 gramos, decorada en el anverso con el logotipo del euro y la "M" coronada de la Real Casa de la Moneda, y en el reservo con un cuadro indicativo del contenido y la equivalencia en las dos monedas. Cada euromonedero contiene cuatro monedas de un céntimo de euro, nueve de dos céntimos, seis de cinco céntimos, seis de 10 céntimos, siete de 20 céntimos, siete de 50 céntimos, dos piezas de un euro y otras dos de dos euros.
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Las oficinas de correos en Italia, las estaciones de servicio en Austria, los kioskos en Finlandia, y algunas estaciones en Bélgica, así como en España las sucursales bancarias abiertas, fueron asaltadas por los compradores desde primeras horas de la mañana. Pero estos monederos no sólo son diferentes por su vía de distribución, sino que también lo son por su variada composición. En Finlandia cada euromonedero está compuesto por 3,88 euros, y en Italia, por 12,91 euros, todo con el objetivo de venderlos por una cifra redonda en la moneda local.
Regalo de Navidad
En muchos países europeos, estos euromonederos están considerados como un regalo de Navidad perfecto. Incluso los 15 dirigentes de la Unión Europea reunidos en el Consejo de Laeken han recibido sus primeros euros.
El próximo lunes, sin embargo, la moneda única tendrá una nueva prueba en Alemania, el país más escéptico hacia la moneda única, con la venta de los primeros euromonederos . Este viernes, un sondeo mostraba un cambio de actitud de los alemanes hacia la nueva moneda, hasta el punto de que algunos temen que no haya existencias suficientes. Las autoridades europeas confían en que, con esta medida, los euros entrarán antes en la vida de los ciudadanos, quince días antes de su puesta en circulación, lo que facilitará el cambio de moneda, el próximo 1 de enero.
En España, las entidades financieras que han abierto sus puertas, principalmente los bancos, se han convertido en una parada obligada para los ciudadanos que han desafiado el frío reinante en España y que han salido a la calle a comprar sus primeros euros, en los conocidos euromonederos . Tanto los bancos como las cajas han destacado el gran interés del público por la nueva moneda y, aunque en pocos casos se han llegado a producir grandes colas ante las ventanillas, lo que sí se ha producido es una mayor afluencia de público que en una jornada normal de sábado.
El propio secretario de Estado de Economía, José Folgado, que se ha acercado a una sucursal del BBVA en Madrid para adquirir su euromonedero , ha destacado la jornada de este sábado como un día histórico, ya que por primera vez los ciudadanos podrán “visualizar y tocar” las monedas de euro.
La nueva moneda europea se distribuye en un paquete de 43 piezas que suman 12,02 euros (2.000 pesetas). Las 43 monedas euro están recogidas en una bolsa transparente de 215 gramos, decorada en el anverso con el logotipo del euro y la "M" coronada de la Real Casa de la Moneda, y en el reservo con un cuadro indicativo del contenido y la equivalencia en las dos monedas. Cada euromonedero contiene cuatro monedas de un céntimo de euro, nueve de dos céntimos, seis de cinco céntimos, seis de 10 céntimos, siete de 20 céntimos, siete de 50 céntimos, dos piezas de un euro y otras dos de dos euros.
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