L D (Agencias) El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio, ha justificado la urgencia de la aprobación de la reforma de la protección por desempleo en la necesidad de evitar efectos perniciosos sobre el empleo como consecuencia de las expectativas generadas ante los cambios previstos en el texto. Aparicio, en rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, precisó que la entrada en vigor de la reforma a partir del lunes no impide su tramitación parlamentaria normal.
Además, rechazó que el objetivo de haber aprobado la reforma veinticuatro horas después de la convocatoria de huelga general por parte de los sindicatos haya sido el de "sorprender". El titular de Trabajo dijo que "las medidas no se toman para soprender. El Gobierno tiene que actuar. Yo llevo más de un mes hablando de este tema y una vez que hemos podido formarnos opinión y hemos sido sensibles a opiniones ajenas de quienes han querido acudir a una mesa a llevarnos sus propuestas, tampoco es bueno seguir con procesos abiertos a expectativas que no contribuyan a la mejora de la contratación y del empleo".
Matizaciones a la reforma
Por su parte, el consejero canario de Empleo y Asuntos Sociales del Gobierno de Canarias, Marcial Morales, afirmó que el Consejo de Ministros ha incluido las peticiones específicas para las islas en el decreto que reforma las prestaciones por desempleo. La principal de esas demandas era que los canarios no puedan ser obligados a aceptar un trabajo a menos de 50 kilómetros de sus domicilios cuando suponga cambiar de isla. A partir de ahora, la distancia máxima que contempla el decreto es de 30 kilómetros. También se han atendido otras consideraciones que el consejero canario planteó en la conferencia sectorial, como que los contratos de inserción realizados por administraciones públicas generen derecho a prestaciones y cuestiones relacionadas con los derechos de los extranjeros que trabajan regularmente en España.
Otro aspecto de la reforma es la desaparición de los llamados salarios de tramitación, -los que se perciben mientras que el juez determina si un despido es o no procedente-. Así, a partir del año que viene, un trabajador despedido pasará a cobrar directamente la prestación de desempleo, algo que, según los sindicatos, es una manera de abaratar el despido. Sólo se pagará el salario de tramitación en caso de que el juez declarara despido nulo improcedente y la empresa readmitiera al trabajador.
Además, rechazó que el objetivo de haber aprobado la reforma veinticuatro horas después de la convocatoria de huelga general por parte de los sindicatos haya sido el de "sorprender". El titular de Trabajo dijo que "las medidas no se toman para soprender. El Gobierno tiene que actuar. Yo llevo más de un mes hablando de este tema y una vez que hemos podido formarnos opinión y hemos sido sensibles a opiniones ajenas de quienes han querido acudir a una mesa a llevarnos sus propuestas, tampoco es bueno seguir con procesos abiertos a expectativas que no contribuyan a la mejora de la contratación y del empleo".
Matizaciones a la reforma
Por su parte, el consejero canario de Empleo y Asuntos Sociales del Gobierno de Canarias, Marcial Morales, afirmó que el Consejo de Ministros ha incluido las peticiones específicas para las islas en el decreto que reforma las prestaciones por desempleo. La principal de esas demandas era que los canarios no puedan ser obligados a aceptar un trabajo a menos de 50 kilómetros de sus domicilios cuando suponga cambiar de isla. A partir de ahora, la distancia máxima que contempla el decreto es de 30 kilómetros. También se han atendido otras consideraciones que el consejero canario planteó en la conferencia sectorial, como que los contratos de inserción realizados por administraciones públicas generen derecho a prestaciones y cuestiones relacionadas con los derechos de los extranjeros que trabajan regularmente en España.
Otro aspecto de la reforma es la desaparición de los llamados salarios de tramitación, -los que se perciben mientras que el juez determina si un despido es o no procedente-. Así, a partir del año que viene, un trabajador despedido pasará a cobrar directamente la prestación de desempleo, algo que, según los sindicatos, es una manera de abaratar el despido. Sólo se pagará el salario de tramitación en caso de que el juez declarara despido nulo improcedente y la empresa readmitiera al trabajador.