L D (Agencias) Estos nuevos “errores” contables fueron descubiertos por WorldCom, acogida a la ley de bancarrota, tras una segunda revisión de su contabilidad. Ésta apunta que las irregularidades en el registro de cuentas son de 3.350 millones de dólares más de los que reveló inicialmente. Algunas de las entradas están relacionadas con fondos de reserva para inversiones que las compañías normalmente mantienen aparte para cubrir gastos extraordinarios que se presenten en el futuro. Cuando se producen estos gastos, cualquier fondo adicional puede ser revertido y registrado como ganancias. Pero el mes pasado los auditores de la compañía telefónica revisaron las entradas y salidas y no está claro si estos 2.500 millones de dólares en gastos están relacionados totalmente con este tipo de inversiones de reserva.
A WorldCom la están investigando por una maniobra fraudulenta mediante la cual la empresa transfirió gastos por valor de 3.850 millones al renglón de inversiones de capital. La Comisión del Mercado de Valores (SEC, por sus siglas en inglés) demandó judicialmente a WorldCom, acusándola de ocultar mediante esa maniobra pérdidas por un total de 1.220 millones de dólares. El escándalo registró un nuevo hito cuando un grupo de 25 bancos denunció que WorldCom los hizo objeto de un fraude por 2.500 millones de dólares, seis semanas antes de admitir las irregularidades contables. El de WorldCom es el último de los escándalos corporativos que se registran en Estados Unidos desde diciembre pasado, cuando tuvo lugar la quiebra de la empresa energética Enron, y que han incluido a otras importantes empresas.
A WorldCom la están investigando por una maniobra fraudulenta mediante la cual la empresa transfirió gastos por valor de 3.850 millones al renglón de inversiones de capital. La Comisión del Mercado de Valores (SEC, por sus siglas en inglés) demandó judicialmente a WorldCom, acusándola de ocultar mediante esa maniobra pérdidas por un total de 1.220 millones de dólares. El escándalo registró un nuevo hito cuando un grupo de 25 bancos denunció que WorldCom los hizo objeto de un fraude por 2.500 millones de dólares, seis semanas antes de admitir las irregularidades contables. El de WorldCom es el último de los escándalos corporativos que se registran en Estados Unidos desde diciembre pasado, cuando tuvo lugar la quiebra de la empresa energética Enron, y que han incluido a otras importantes empresas.