Por si ya no fueran poco creíbles y vagos los propósitos de Zapatero de acometer un Plan de Austeridad para reducir el gasto público en 50.000 millones de euros, esta semana hemos tenido nuevas noticias de en qué gasta (más bien, dilapida) el dinero del contribuyente el Ministerio de Igualdad, uno de los muchos que directamente habría que suprimir para acometer un proyecto de reducción del gasto público mínimamente creíble.
Me refiero a las "Investigaciones relacionadas con estudios feministas, de las mujeres y del género", que el Ministerio de Bibiana Aído acaba de subvencionar con 845.803 euros, y entre las que brilla con luz propia un "Mapa de Inervación y Excitación Sexual en Clítoris y Labios Mayores", a cargo de una profesora de la Universidad Complutense y dotado con 26.000 euros.
Por lo visto no eran suficientes los "talleres de masturbación para adolescentes" a los que el Gobierno extremeño había dedicado 14.000 euros; era necesario, además, que el Ministerio de Igualdad arrimara el hombro con la elaboración de un mapa de excitación sexual del clítoris, que no sabemos si conllevará –ya todo es posible– el reparto de algún tipo de brújula.
De entre los 22 investigadores que se reparten el pastel de los casi 150 millones de las antiguas pesetas ahora aprobados, 21 son mujeres; cuota nada igualitaria que, sin embargo, queda en un segundo plano ante estudios tan delirantes como el de Reparaciones europeas contemporáneas y memoria de la esclavitud: esclavas negro-africanas y españolas abolicionistas (siglos XVI al XIX), dotado con 22.726 euros.
Quiero recordar, además, que Aído ya destinó el mes pasado partidas del Instituto de la Mujer por un montante de casi 600.000 euros para la realización de "postgrados universitarios sobre estudios de feminismo", de los que se aprovecharon organizaciones afines al PSOE, como la Fundación Isonomía. Sólo por impartir cinco cursillos de esta "imprescindible" área del conocimiento, esta Fundación se embolsó 60.000 euros.
También quiero recordar que cuatro meses antes, en el pasado mes de septiembre, también se asignaron otros 200.000 euros para "fomentar la edición de publicaciones relacionadas con las mujeres", con obras tan sumamente interesantes como Las psicólogas hablan de psicología o Doria Shakif, feminista egipcia.
Y es que, ¿qué suponen cuatro millones y medio de parados, un déficit público del 11,4% y el endeudamiento de generaciones venideras comparados con la carencia mucho más dramática que supone no disponer de un mapa de excitación sexual del clítoris, ignorar las vicisitudes de las esclavas negro-africanas del siglo XVI al XIX o desconocer las hazañas de una feminista egipcia del pasado siglo?
Fuera de bromas, no niego que la cuantía de estos gastos superfluos no es nada comparado con los que también conlleva la existencia misma de muchos otros ministerios, por no hablar de la rémora que supone el despilfarrador Estado de las Autonomías y los también manirrotos ayuntamientos. Sin embargo, los insultantes ejemplos que nos ha brindado el Ministerio de Igual Da ilustran a la perfección el nulo respeto del Gobierno de Zapatero por el dinero del contribuyente; y sin ese respeto, sus supuestos propósitos de reducción del gasto público quedarán en papel mojado, con o sin excitación del clítoris.