Las comunidades autónomas despilfarran ingentes cantidades de dinero con destino al ornato de su clase política y a la financiación de las actividades más absurdas, razón por la cual ni siquiera con lo que nos sacan a los contribuyentes vía impuestos y transferencias del presupuesto nacional tienen suficientes recursos para cuadrar sus balances.
Así pues, también las autonomías contribuyen a agrandar el agujero de nuestras finanzas futuras pidiendo un dineral prestado a los mercados, a un interés cada vez más alto dada nuestra ruina conjunta, que nuestros descendientes deberán devolver a través de una fiscalidad cada vez más confiscatoria.
La Comunidad Autónoma de Cataluña es, a estos efectos, no sólo la autonomía que acapara un mayor nivel de deuda pública "viva" (32.000 millones de euros; la cuarta parte del total de la deuda autonómica y prácticamente el doble que la segunda clasificada: la Valencia de Camps) sino la que continúa endeudándonos a todos los españoles al ritmo más despreocupado.
En efecto, en la edición de hoy de su diario oficial, Cataluña emite oficialmente un nominal de 1.860 millones de euros en deuda pública, los llamados acertadamente "bonos patrióticos" con la esperanza de que los inversores le arrebaten prácticamente el papel de las manos pudiendo llegar así al objetivo real, que es la captación de 3.300 millones de euros a un interés que oscila entre el 4,25 para los bonos a un año y el 4,75 por ciento para los de vencimiento a los veinticuatro meses.
¿Para qué va a utilizar Arturo Mas ese dineral? Pues no lo aclara la disposición, aunque con el desastre heredado del tripartito, básicamente se trata de poder hacer frente a los gastos ya comprometidos por el anterior gobierno, para los cuales no hay dinero suficiente en la caja.
Si usted, como seguramente es el caso, está interesado en contribuir al engrandecimiento de la nación catalana a cambio de un elevado interés, sepa que sólo con disponer de mil euros podrá convertirse en uno de los orgullosos financiadores del gobierno de CIU en esta legislatura. Una gente tan seria que igual hasta le devuelven el préstamo a su vencimiento. Mucha suerte.