El Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) ha multado con 1,1 millones de euros a Ernst & Young por el informe de auditoría que realizó a Martinsa-Fadesa en 2007, una sanción que la auditora anunció que recurrirá próximamente ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Ernst & Young manifestó en un comunicado su desacuerdo con esta decisión dado que el mencionado Informe de Auditoría se realizó "siguiendo los criterios establecidos en las Normas Internacionales de Contabilidad y sobre la base de la información aportada por la propia compañía".
Se trataría de una sanción administrativa impuesta por el ICAC a la auditora por el informe realizado a la inmobiliaria en 2007, año en el que Martinsa adquirió Fadesa mediante un endeudamiento que le obligó, meses después, a presentar el concurso voluntario de acreedores, informa EFE.
En este informe, la firma auditora considera que las cuentas de Martinsa de 2007 son una imagen fiel del patrimonio y de la situación financiera de Martinsa y de los resultados de sus operaciones y sus recursos obtenidos y aplicados durante el ejercicio.
En el citado ejercicio, la inmobiliaria ganó 60 millones de euros, el 140 % más que en 2006, con unos ingresos de 1.208 millones, más de ocho veces más, y una deuda de 5.153 millones.