La bronca política en el debate de los Presupuestos Generales del Estado – si bien estuvo encendida –no la protagonizaron Cristóbal Montoro y el líder de la oposición Alfredo Pérez Rubalcaba, sino el ministro y la diputada de UPyD, Rosa Díez. Eso sí, con el Congreso de los Diputados ya prácticamente vacío.
La líder de Unión Progreso y Democracia comenzó su intervención recordando y reconociendo el contexto con el que se encontró el Gobierno de Rajoy cuando ganó las elecciones. Llegaron con una "triple crisis" en el país: "política, económica y social. El Gobierno que les precedió provocó la política y reaccionó tarde a la económica".
"Es verdad, dejaron el país hechos unos zorros", resumió Díez. Ahora bien, su grupo parlamentario presenta una enmienda a la totalidad, porque, según los diputados magentas, a estos presupuestos "les falta lo sustancial: una visión de país". Tampoco hay, adujo Díez, "una estrategia clara de liderazgo político".
"No saben explicar las medidas económicas", le reprochó Díez a Montoro. "Por evitar que se hunda el barco, se olvidan de fijar el rumbo y de tomar el timón". La líder de UPyD ahondó en este argumento diciendo que "estaría bien que si saben a dónde vamos nos lo expliquen a todos los españoles. Cada decisión que toman viene precedida de varios desmentidos, incluso, a veces, esos desmentidos los realiza el mismo ministro que anunció la medida".
Según Rosa Díez, el Gobierno del Partido Popular "no tiene un proyecto para España, ni a corto ni a largo plazo". Y no lo tienen "porque carecen de un modelo de país. Van a remolque de los acontecimientos". La líder de UPyD aconsejó al Ejecutivo que explique sus propias medidas, "sólo así, si los ciudadanos entienden el por qué y el para qué, irán detrás de quien les pide el sacrificio".
UPyD enmienda los Presupuestos presentados por el Gobierno "porque no son creíbles", señaló Díez. "La clave del ajuste no está en estos Presupuestos, está fuera, en los Presupuestos de las Comunidades Autónomas", que son los que piden las autoridades europeas, dijo la diputada magenta.
Para Díez la "filosofía" de lo que el ministro Montoro explicó este martes por la mañana, durante su intervención inicial en el Congreso de los Diputados, "cabe en un tuit y le sobran 90 caracteres: ‘sacrificaremos cualquier cosa para no tocar las Comunidades Autónomas'".
En definitiva, según UPyD, el Ejecutivo "mantiene lo superfluo". La propuesta del partido de Rosa Díez es acabar con el Estado "elefantiásico" fusionando "ayuntamientos, revisando el modelo territorial, suprimiendo diputaciones y duplicidades" y eliminando lo innecesario. Como uno de los ejemplos, las 166 oficias exteriores que tienen las autonomías en el exterior frente a las 118 embajadas españolas. "No hay un relato de país, no hay una estrategia de liderazgo. Es hora de la política; haga el favor de traernos a la Cámara unos PGE que respondan a las necesidades de España".
Montoro, alterado: "¡Menudo argumento!"
El ministro Cristóbal Montoro salió alterado a la tribuna a replicar a Rosa Díez. "No he entendido bien su argumento. ¿Rechazan el presupuesto porque no plantea la reforma del Estado? ¡Menudo argumento! ¿Me lo está diciendo en serio, que reinventemos el Estado en España a través de estos presupuestos? Como usted dice, es la hora de la política seria, con argumentos y comprometida", dijo.
Además, rechazó las acusaciones de manga ancha para las comunidades autónomas recordando que la Ley de Estabilidad Presupuestaria permite al Ejecutivo central controlar su déficit. "¿De dónde saca que no lo voy a controlar? ¡Si está en todas las páginas web, lo hemos aprobado con la Ley!", espetó.
"Estos presupuestos inciden sobre las comunidades autónomas, y mucho", insistió, criticando que la formación magenta le acuse de estar al servicio de los nacionalismos por "dialogar" con ellos. Por último, insistió en que el Gobierno apuesta tanto por la estabilidad presupuestaria como forma para salir de la crisis como por la reforma de las administraciones públicas.
Las palabras del ministro enfadaron a la portavoz de UPyD, y más cuando al subir por última vez a la tribuna a replicarle, el ministro mantenía una conversación paralela. "Es usted el que no escucha y luego contesta a cosas que no se han dicho", le replicó exigiéndole "un mínimo de respeto a los argumentos que, aunque no se compartan, no deben ser despreciados". "Aunque no seamos nacionalistas", zanjó.