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Fundación Heritage

A propósito del socialismo

Ya lo dijo Margaret Thatcher: "El problema del socialismo es que, al final, se le acaba el dinero de los demás".

Para los que no se dieron cuenta de lo que estaba en juego, ideológicamente hablando, en las recientes elecciones: el diccionario Merriam-Webster ha revelado que muchos americanos sí eran conscientes de la confrontación entre las ideas capitalistas y las socialistas.

Los términos socialismo y capitalismo recibieron este año más búsquedas en el popular diccionario online que cualesquiera otros. Como se esperaba, los picos de interés coincidieron con las convenciones de los partidos republicano y demócrata y con los debates televisados.

Socialismo: 1. Sistema de organización social y económico basado en la propiedad y administración colectiva o estatal de los medios de producción y en la regulación, por parte del Estado, de las actividades económicas y sociales y de la distribución de los bienes. // 2a. Sistema de sociedad o grupo social en el que no hay propiedad privada. // 2b. Sistema o condición social en que los medios de producción son de propiedad y control estatales. // 3. En la teoría marxista, etapa social de transición entre el capitalismo y el comunismo que se distingue por una distribución desigual de bienes y capitales, según el trabajo realizado.

Capitalismo: 1. Sistema económico caracterizado por la propiedad privada o empresarial de los bienes de capital, por inversiones que se determinan por medio de decisiones privadas y por unos precios, una producción y una distribución de bienes determinados principalmente por la competitividad dentro del libre mercado.

Sea como fuere, en el plano político es difícil mejorar la incisiva definición de socialismo hecha por Margaret Thatcher: se trata de un sistema en que el que preferiría que los pobres fuesen más pobres "siempre que los ricos fueran menos ricos".

Es un error centrarse en las diferencias de ingresos en vez de en el crecimiento económico general; según Thatcher, "de ese modo no se crea riqueza y oportunidad; de ese modo no se crea una democracia patrimonial".

Incluso si eso no fuese en sí mismo moralmente injusto, Thatcher señaló por qué las medidas económicas redistribucionistas no funcionan en la práctica: "El problema del socialismo es que, al final, se le acaba el dinero de los demás".

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