El grupo catalán Panrico está al borde del concurso de acreedores, tras rechazar los trabajadores de Santa Perpetua de Mogoda (Barcelona) el último expediente de regulación de empleo planteado en la mesa de negociaciones. En declaraciones recogidas por Europa Press, los secretarios generales de UGT y CCOO de Cataluña han manifestado su preocupación ante la grave situación en la que se encuentra la compañía; un callejón sin salida.
El grupo de panadería y bollería industrial catalán podría suspender pagos entre el lunes y el martes, según apuntan fuentes del diario económico Expansión. El preacuerdo rechazado por los trabajadores de Barcelona, por 195 votos en contra, dos a favor y una abstención, contemplaba la extinción de 745 empleos y ampliaba las indemnizaciones por despido de 23 a 25 días de salario por año de servicio, con un tope de catorce mensualidades.
Sin embargo, este preacuerdo planteado en la mesa de negociación fue aceptado por las plantas de de Zaragoza, Valladolid, Córdoba y Madrid, pero la condición sine qua non impuesta por la dirección de la compañía es que cualquier pacto al que se llegue debe de ser aceptado por todas las plantas.
"Debemos respetar las decisiones que los trabajadores toman en cada momento, en concreto en Santa Perpetua. Yo deseo que podamos salir del conflicto con las plantas de Panrico abiertas", ha afirmado Josep Maria Àlvarez, representante de CCOO, en declaraciones a los medios durante la manifestación celebrada este domingo en Barcelona contra los recortes y los presupuestos de 2014. Además, el representante sindical añadía, en defensa de la plantilla de Barcelona, que las mejoras de este último preacuerdo por parte de la dirección eran "prácticamente inexistentes".
Por su parte, el representante de UGT en Panrico, Joan Carles Gallego, ha insistido en que la fábrica barcelonesa está siendo discriminada, a pesar de ser la más productiva de España: "No podemos admitir el chantaje. La empresa debe entender que debe negociar y debe seguir abierta".
Huelga de repartidores
Tal y como recoge Expansión, los transportistas autónomos encargados del reparto de los productos del grupo Panrico se declararon en huelga el pasado jueves, al no haber recibido ni un euro por los servicios prestados durante el mes de octubre.
Con lo que la situación de la compañía se agrava aún más, no ya sólo por tener cerrada las líneas de crédito de la banca, sino también por haber dejado de percibir ingresos. La empresa cada día pierde 150.000 euros.