Tras más de tres meses de huelga, la fábrica de Panrico en Santa Perpetua (Barcelona) parece abocada al cierre. Y es que la planta barcelonesa es el único cabo suelto que tiene ahora mismo la compañía, tras conseguir in extremis esquivar el concurso de acreedores. Tal y como publica El Economista, fuentes de la compañía aseguran que si los juzgados dan la razón al comité de empresa, ante la demanda que presentó Panrico por un paro ilegal, el cierre de la planta será inminente. El conflicto entre la planta de Barcelona y la directiva ha originado que su producción se haya trasladado ya a otros centros, ante la imposibilidad de que ambas partes lleguen a un acuerdo.
Panrico negocia una rebaja en sus alquileres
Tras realizar un fuerte proyecto de ajuste, con el despido de 745 trabajadores y 300 autónomos, además de rebajas salariales, la compañía trata ahora de rebajar los alquileres de las fábricas. Y es que en 2007, Panrico vendió al fondo de inversión británico Matrix European Real Estate Investment Trust (Mereit), cuatro de sus fábricas. En concreto, las de Paracuellos del Jarama (Madrid), Valladolid, Murcia y Puente Génil (Córdoba).
Además, Matrix European posee dos fábricas más, la de Barcelona y la de Zaragoza. El objetivo ahora de Panrico es tratar de rebajar los alquileres en sus fábricas en hasta un 25%. Las dificultades financieras del grupo son palpables. Sólo en en 2012 perdió más de 98 millones de euros, y acumula unas pérdidas de más de 700 millones.