El juez Fernando Andreu ha remitido a los peritos del Banco de España toda la documentación relativa a las tarjetas de crédito "opacas" con las que la cúpula de Caja Madrid gastó más de 15 millones de euros entre 2003 y 2012 para que analicen si los 86 exdirectivos que las usaron pudieron cometer algún delito.
En una providencia, a la que ha tenido acceso Libertad Digital, el magistrado incorpora el informe de la Fiscalía Anticorrupción fechado el pasado día 26, junto con toda la documentación recibida por parte de la propia entidad y del FROB, a la pieza separada que desgajó del caso Bankia analizando las retribuciones percibidas por el Consejo de Administración de la entidad.
Según fuentes jurídicas, Andreu quiere que los peritos le precisen si las personas que disfrutaron de las tarjetas pudieron cometer los delitos societarios y de apropiación indebida que señaló en su informe la Fiscalía Anticorrupción.
En concreto el juez quiere saber si ese vaciamiento de la entidad por parte de los ex-directivos a través de las 'tarjetas fantasmas' puede afianzar el delito de administración desleal -englosado en el Código Penal como delito societario- que él investiga actualmente en el caso Bankia.
Más de 15 millones en gastos
El fraude fue detectado en primer lugar por la propia entidad la que, a través de una auditoría interna, alertó hace meses de estas tarjetas, emitidas en un primer momento por Caja Madrid, y lo comunicó el pasado 26 de junio a su principal accionista, el FROB.
De esta forma, el fondo de rescate español avisó a Anticorrupción de que existían estas tarjetas de crédito, de las que no hay soporte contractual ni consta decisión al respecto por parte de los órganos de gobierno, y que suman en total gastos por 15,5 millones, informa Efe.
El grueso, 15,25 millones, fueron cargados exclusivamente a Caja Madrid, en tanto que 245.200 euros adicionales fueron facturados a Bankia en 2011 y 2012, antes de la llegada de José Ignacio Goirigolzarri a la presidencia.
De esa cifra, 3 millones fueron gastados en restaurantes, 2 millones en disposiciones de efectivo, más de 1,5 millones en desplazamientos y viajes, más de 1 millón en grandes superficies, cerca de 800.000 euros en hoteles y unos 700.000 euros en ropa y complementos.
Un total de 65 miembros del consejo de administración y de la comisión de control y otros 21 consejeros ejecutivos y directivos se beneficiaron de estas tarjetas, gestionadas directamente por Ildefonso Sánchez Barcoj, exdirector general de Caja Madrid y "mano derecha" del expresidente de la entidad Miguel Blesa.
El propio Sánchez Barcoj encabeza el listado de gastos con 484.200 euros, seguido por el exvicepresidente de la caja José Antonio Moral Santín, de Izquierda Unida, con 456.500 euros, y el exdirectivo Ricardo Morado, con 448.300 euros.
Blesa y Rato, beneficiarios
La factura de Blesa, por su parte, asciende a 436.700 euros, una media anual de 54.600 euros, aunque solo en 2009, su último año completo al frente de Caja Madrid, gastó 65.000 euros.
En ese último periodo, Sánchez Barcoj seguía estando en la entidad y volvió a ser el principal beneficiario, con 90.879,24 euros en gastos; aunque también figuran otros gastos de exdirectivos de Caja Madrid que siguieron disponiendo de tarjetas.
La lista la completa el expresidente de Bankia Rodrigo Rato y los ex directivos José Manuel Fernández Norniella y Matías Amat, si bien todos ellos devolvieron a Bankia a principios de julio de 2014 los gastos sin justificar de sus tarjetas de crédito después de que Bankia se los reclamara.