Las acciones de Renault han llegado a caer más de un 20% en Bolsa durante la sesión de este jueves, aunque, finalmente, ha cerrado con un retroceso del 10,28%. El desplome llegó tras un teletipo de la agencia AFP en donde se anuncia que la Fiscalía gala ha confiscado ordenadores en los cuarteles generales de la compañía para esclarecer un posible escándalo de emisiones similar al que afecta a Volkswagen.
Los registros tuvieron lugar el pasado 7 de enero, pero han saltado a la luz una semana después. Una vez la información ha entrado en circulación, la reacción en los mercados ha sido casi inmediata, como muestra la siguiente gráfica de Bloomberg.
La investigación corre a cargo de la oficina de fraude del Ministerio de Economía. Las autoridades francesas han visitado diversas plantas de fabricación de la compañía para esclarecer la situación. Peugeot también sufrió las consecuencias en Bolsa. De hecho, la categoría que agrupa las acciones del sector automovilístico europeo han bajado un 3,98%.
Fiat ha sido la segunda compañía que más ha caído, con el 7,94%, afectada también por conocerse que en los Estados Unidos (EEUU) varios concesionarios de la marca habían recibido órdenes para inflar las ventas. Por detrás de la marca italiana, Peugeot ha cedido el 5,05%, la alemana Rheinme Tall ha bajado un 4,97%; Ferrari, el 4,62%, seguida de Valeo, encargada de suministrar varios productos a los concesionarios, con el 4,02%.
También se ha visto afectada la compañía de equipamiento para automóviles Faurecia, que ha caído un 3,84%; Volkswagen ha perdido el 3,73%; el germano Daimler, propietario de la marca Mercedes, ha retrocedido un 3,56% y BMW, el 3,35%. Porsche ha bajado el 3,32%; Continental AG, el 2,27%, seguida de Michelin, con el 1,6%; y Nokman Renkaat, con el 1,47%.
El pasado septiembre se descubrió que el grupo alemán Volkswagen manipuló los programas informáticos de cientos de miles de automóviles diesel y gasolina, lo que desencadenó una ristra de procesos legales contra la compañía en distintos países en los que comercializa sus productos.
La respuesta de Renault
Tras saltar la noticia de la investigación a Renault, el fabricante galo aseguró que las autoridades están realizando pruebas en vehículos de diferentes marcas del país, entre las que se encuentra Renault, pero que no se ha detectado ningún dispositivo manipulador de emisiones.
En un comunicado, la firma confirmó que, a raíz del caso del software Volkswagen, las autoridades francesas crearon una comisión, a través de la que realizarán pruebas a cien vehículos en el país, entre los que se encuentran 25 unidades de Renault (debido a su cuota de mercado en el país). En este sentido, la corporación señaló que hasta finales del pasado mes de diciembre se habrían analizado once vehículos, entre los que se incluyen cuatro de la firma del rombo, en los que no se habría revelado la presencia de un software o dispositivo que manipulara las emisiones.
La compañía explicó que la comisión técnica creada tiene el objetivo de garantizar que los fabricantes franceses de automóviles no equipan en sus vehículos software o dispositivos similares a los instalados en algunos modelos de Volkswagen. Ante esta situación, la empresa indicó que las pruebas en curso son positivas, ya que pueden anticipan soluciones para mejorar sus vehículos, tanto los de las fábricas como los de los modelos en circulación y apuntó que presentó un Plan de Emisiones, con el objetivo de mejorar la eficiencia energética de sus vehículos.
Por otro lado, la firma destacó que, en paralelo, la Dirección General de Política, Asuntos del Consumidor y Competencia de Control de Fraude de Francia decidió llevar a cabo una investigación para valorar los primeros análisis de dichos vehículos realizados por la comisión. En el marco de dicha investigación paralela se realizaron visitas a la sede central de Renault, así como al Centro Técnico de Lardy y al Tecnocentro de Guyancourt. La firma señaló que sus equipos están cooperando en ambos procesos.