El Gobierno canario creará un impuesto que gravará las bebidas azucaradas y la bollería industrial en la reforma fiscal que tiene previsto llevar al Parlamento autonómico el próximo año, según ha anunciado su consejera de Hacienda, Rosa Dávila, en declaraciones a Canarias 7.
Dávila defiende el establecimiento de este tipo de gravámenes para intentar contener los altos niveles de obesidad y sobrepeso, un problema que en estos momentos afecta casi a la mitad de la población del archipiélago (el 37,1% de los canarios tiene sobrepeso y el 17,1% padece obesidad).
La consejera asegura que el futuro impuesto no persigue recaudar, sino "fomentar una cultura de alimentación más saludable", porque los datos ya ponen en evidencia "que es preciso tomar medidas".
En principio, el Gobierno de Canarias pretende aprobar ese nuevo gravamen dentro de la reforma fiscal "profunda" que propondrá al Parlamento en el tramo final de la legislatura. No obstante, no descarta adelantar su aprobación, vía ley de Presupuestos, si considera que la entrada en vigor del nuevo impuesto a las bebidas azucaradas y a la bollería industrial es "urgente".
La primera región española en aprobar un impuesto similar ha sido Cataluña, que empezó a gravar a las bebidas azucaradas el pasado lunes. Su secretario de Hacienda, Lluís Salvadó, ya ha mostrado que "hay la voluntad" de aplicar un impuesto similar en otros productos con exceso de grasa y azúcar, como es el caso de la comida basura y la bollería industrial.