El número de empresas que han salido ya de Cataluña empujadas por el golpe separatista asciende ya a los 2.540. La gran evasión de empresas continúa pese a la puesta en marcha del artículo 155 de la Constitución, aunque es cierto que se ha moderado el ritmo de traslado de sedes de empresas pequeñas y grandes de Cataluña. La última de ellas, el gigante hotelero Hotusa, que anunciaba este jueves el traslado de su sede.
En Es la Mañana de Federico, de esRadio, el presidente de Freixenet, José Luis Bonet, ya advirtió de que "el daño está hecho" y pronosticaba que sus efectos "ya se están notando". Ahora, las agencias de calificación de crédito, aunque tratan de matizar mucho sus pronósticos, terminan reconociendo los fuertes efectos que sobre la economía catalana y, por tanto, española, está teniendo el golpe en Cataluña.
Este jueves, la agencia Standard & Poor's (S&P) sostiene que la economía española sigue siendo una de las economías de más rápido crecimiento de la eurozona y que mantendrá este "fuerte" impulso hasta 2018.
Frenazo económico
Sin embargo, al tiempo que asegura que las tensiones políticas en torno a la evolución de la situación política en Cataluña, hasta ahora, no ha tenido ningún impacto visible en los mercados financieros y en la confianza empresarial –parece que para S&P la huida de 2.540 empresas o la racha de bajadas en el Ibex más larga de su historia reciente no son efectos visibles para esta agencia–, termina pronosticando una desaceleración gradual del crecimiento y advierte sobre una caída de la confianza de los consumidores y de las empresas, así como a una interrupción de la producción, fundamentalmente en Cataluña. En este sentido, agrega, la aplicación ordenada del artículo 155 y el anticipo de las elecciones "han reducido la inestabilidad".
En cuanto a otras previsiones de la economía española, S&P prevé que el país concluya 2017 con una tasa de paro del 17,3%, la cual, según sus propias estadísticas, bajará hasta el 15,6% en 2018 y al 14,5% en 2019. De cara a los próximos tres años, la firma pronostica que el país contará con un 13,6% de la población en paro.
En cualquier caso, S&P insiste en que el crecimiento económico alcance el 3% este año y el 2,6% en 2018, pero apunta que se ralentizará al 2% en 2018 y al 1,7% en 2020. "Las condiciones económicas favorables entre los socios comerciales y el aumento de la competitividad debería respaldar el crecimiento de las exportaciones", señala el documento. No obstante, S&P pronostica una desaceleración gradual del crecimiento.
"La incertidumbre política sigue siendo uno de los principales riesgos para nuestras perspectivas", asevera la firma. En este sentido, explica que el Gobierno minoritario, junto a un fragmentado Parlamento, podrían obstaculizar las reformas estructurales adicionales para continuar con el impulso del crecimiento económico.
Desempleo
La tasa de desempleo, que se situó en el 16,7% en septiembre, aún sigue siendo una de las más altas de la eurozona, aunque S&P señala que se encuentra en su nivel más bajo desde enero de 2009. Al mismo tiempo, la firma advierte de que la mayor parte de los nuevos contratos en la creación de empleo en España siguen siendo temporales, mientras que critica que la transición de temporales a indefinidos es muy lenta.
S&P prevé que España concluya 2017 con una tasa de paro del 17,3%, la cual, según sus propias estadísticas, bajará hasta el 15,6% en 2018 y al 14,5% en 2019. De cara a los próximos tres años, la firma pronostica que el país contará con un 13,6% de la población en paro.
Montoro: "No hay amenazas" en Cataluña
Del lado del Gobierno, el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha llegado a afirmar que la crisis política en Cataluña derivada del desafío independentista "ya no es una amenaza" para la continuidad de la recuperación económica desde la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
Montoro ha destacado que todos los partidos que concurren a las elecciones del 21 de diciembre en Cataluña "han aceptado ya la aplicación de la legalidad vigente".
Exposición catalana de CaixaBank y Sabadell
También se ha pronunciado la agencia de calificación Moody's para advertir de que la exposición de CaixaBank y Banco Sabadell a Cataluña "continúa siendo un riesgo" para ambas entidades por "la tensión política en curso" en la región, a pesar de haber trasladado sus sedes a la Comunidad Valenciana. En un informe, Moody's indica que esta tensión política es "negativa" para el crédito de ambos bancos, puesto que podría llevar a la volatilidad de su financiación y su actividad empresarial.
La firma también señala que el traslado de la sede de ambos bancos fuera de Cataluña –CaixaBank a Valencia y Banco Sabadell a Alicante– ha permitido detener la salida de depósitos y ha aliviado las presiones de liquidez.
Moody's explica que CaixaBank sufrió una "modesta" salida de depósitos, según la propia entidad bancaria, que se detuvo cuando cambió de sede, mientras para el Sabadell la pérdida de depósitos, que sucedió a principios de octubre, fue "limitada" y también se interrumpió con el traslado de sede. Además, en el caso del Sabadell, a partir del cambio de sede los flujos de depósitos se han vuelto positivos, según ha informado el propio banco.
Moody's subraya que, como la probabilidad para una secesión de Cataluña es "baja", no ve un "impacto material inminente" para los bancos españoles, a pesar de que todos ellos están expuestos a Cataluña "en cierta medida" por el tamaño de esta región y su riqueza.
Para la firma, el Banco Sabadell es la entidad más expuesta al contexto político porque genera el 26% de su actividad empresarial doméstica en Cataluña, seguido por CaixaBank y el BBVA, que producen el 22% y el 20%, respectivamente.