Menú

Solbes cree que el Gobierno de Zapatero "debió ser más valiente" para frenar la burbuja y afrontar la crisis

El exministro de Economía con el PSOE admite que se equivocó a la hora de prever la crisis y su magnitud.

El exministro de Economía con el PSOE admite que se equivocó a la hora de prever la crisis y su magnitud.

El exvicepresidente del Gobierno Pedro Solbes ha considerado este miércoles que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero "debió ser más valiente" para intentar "frenar el tren", en alusión a una economía que estaba a punto de descarrilar. Lo ha hecho en la Comisión de investigación sobre la crisis financiera que se desarrolla en el Congreso de los Diputados.

El exministro de Economía y Hacienda desde abril de 2004 a abril de 2009 ha defendido que durante la primera legislatura en el Gobierno del PSOE sus críticas al boom inmobiliario cayeron "en saco roto". "La limitación a la mitad de la ayuda para la compra de vivienda o mis críticas públicas sobre viviendas iniciadas o lo inadecuado de las hipotecas a 40 años cayeron en saco roto", ha espetado Solbes durante su comparecencia en la comisión parlamentaria que investiga la crisis financiera, la quiebra de las cajas de ahorro y el rescate.

En opinión de Solbes, en 2004, cuando se iniciaron 800.000 viviendas frente a una necesidad estimada de 450.000, los operadores del sector de la construcción consideraban que era más importante mejorar su posición frente a los competidores. "Que la fiesta no terminase".

Asimismo, Solbes ha criticado que la LORCA ampliaba las capacidades de las cajas de ahorros para salir de su negocio tradicional, lo que permite entender el crecimiento del crédito en el sector de la construcción e iniciar más viviendas de las necesarias. En este sentido, ha reconocido que las medidas aplicadas por el Ministerio para ampliar el acceso a la vivienda no resultaron lo suficientemente eficaces para afectar a la evolución de su precio. Además, ha admitido que medidas como los vehículos de inversión estructurada y las provisiones anticíclicas desalentaron el crecimiento del crédito, "pero no lo suficiente".

El exministro también ha dicho que "no se actuó a tiempo". "No fuimos capaces de llevar a cabo un ajuste más suave" y"se debió ser más valiente"tanto para corregir el déficit por cuenta corriente como para resolver los problemas de algunas cajas. Sobre esta cuestión en concreto, ha considerado que hubo un exceso de confianza en el sistema financiero español en su conjunto y no se distinguió entre entidades, con lo que se ignoró las debilidades de una parte del sector.

Aún así, ha justificado que era políticamente difícil iniciar la transformación de las cajas y hubo que esperar a que afloraran los problemas en una entidad, en este caso Caja Castilla-La Mancha, ya en la recta final de su mandato para iniciar el proceso. Solbes, no obstante, ha asegurado que estuvo puntualmente informado por parte del Banco de España de los problemas que sucesivamente se fueron planteando.

Zapatero se apoyó mucho en los sindicatos

Por otro lado, Solbes también ha criticado que Rodríguez Zapatero se apoyara "excesivamente" en los sindicatos a la hora de emprender reformas sociales y laborales:"Habríamos evitado problemas posteriores".De hecho, ha señalado que este apoyo en los agentes sociales fue uno de los puntos de desacuerdo con Zapatero, y que se reflejó posteriormente en la crisis, cuando Solbes apostó, ha dicho, por "reavivar todo el tema de mercado laboral".

No fue hasta 2010 cuando el Gobierno socialista emprendió una reforma laboral, un año después de la salida de Solbes del Gobierno. Sin embargo, hasta entonces Zapatero creía, ha dicho su exvicepresidente, que había "margen" para poder actuar con una política expansiva "porque parecía que las arcas estaban llenas".

Admite errores de previsión

Le consta que la institución presidida entonces por Miguel Ángel Fernández Ordóñez aumentó su actividad supervisora y seguía con más atención la evolución de la morosidad, al tiempo que autorizaba el uso de provisiones anticíclicas. Ahora ha dejado entrever que la situación financiera es bastante mejor, en parte por las exigencias de capital europeas, pero ha considerado que "no hay que bajar la guardia".

Sobre las debilidades de España para afrontar la crisis, Solbes ha sacado pecho de que el país, después de una larga etapa de crecimiento, había logrado no solo reducir la ratio de deuda pública sobre el PIB hasta mínimos históricos, sino seguir aumentado las dotaciones a la hucha de las pensiones. Con estos mimbres, ha opinado, la crisis pudo encararse mejor, pero nadie previó la doble recesión que sufriría la economía en 2011 y él, personalmente, pensaba que gracias a que España formaba parte de la zona de euro podría corregir más fácilmente su déficit por cuenta corriente.

En este sentido, Solbes ha admitido "claros errores de previsión en términos macroeconómicos" y también a la hora de detectar la llegada de una segunda recesión y su magnitud. "No fuimos capaces de detectar la fuerte recesión", ha dicho, recordando que si bien el Gobierno previó una contracción del PIB del 2% en 2009, la caída alcanzó el 3,6%. También ha señalado que en 2010 el Ejecutivo de Zapatero confiaba en "volver a la normalidad" y recuperar el crecimiento, algo que "tampoco sucedió". "Con la segunda recesión nos equivocamos totalmente", ha aseverado.

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios