La buena marcha que venía registrando el mercado de trabajo tropezó en el primer trimestre, según refleja la última Encuesta de Población Activa (EPA), publicada este jueves. Entre enero y marzo se destruyeron 124.100 empleos, un 0,6% respecto al trimestre anterior, lo que situó el total de ocupados en 18.874.200 personas. Este recorte de puestos de trabajo es el más elevado en un primer trimestre desde 2014, cuando desaparecieron 184.600 empleos.
La ocupación subió en la Agricultura (13.100 más) y la Construcción (8.200), pero bajó en los Servicios (-110.500) y la Industria (-34.900). Asimismo, el empleo privado descendió en 155.200 personas, situándose en un total de 15.768.400, mientras que el empleo público creció en 31.000, hasta 3.105.800, situándose apenas un 6% por debajo del récord registrado en 2011.
Igualmente, se desaceleró la creación de empleo a nivel interanual. Así, en los 12 últimos meses, la economía nacional generó 435.900 nuevos puestos de trabajo, lo que supone un avance interanual del 2,36%, 29 centésimas menos que el trimestre previo.
Pese a ello, es preciso eliminar el efecto calendario para poder analizar la evolución del mercado de trabajo en términos homogéneos, ya que la Semana Santa cayó este año en marzo. De este modo, una vez descontada la estacionalidad, las estimaciones del INE indican que el crecimiento de la ocupación se estabilizó en el 0,5% intertrimestral. Es decir, España siguió creando empleo entre enero y marzo, pero a un ritmo inferior al previsto inicialmente, según advierte BBVA Research.
En cuanto al paro, sucede algo similar. El desempleo subió en 29.400 personas en el primer trimestre del año, lo que supone un 0,8% más que en el trimestre anterior, hasta situarse el total de desempleados en 3.796.100 personas. Como resultado, la tasa de paro se incrementó dos décimas, hasta el 16,74%.
Se trata de la subida del desempleo más elevada en un primer trimestre desde el año 2013, cuando subió en más de 257.200 personas. En los primeros trimestres de 2016 y 2017 se registraron incrementos del desempleo de 11.900 y 17.200 personas, respectivamente, mientras que en 2014 y 2015 hubo descensos de 2.300 y 13.100 parados.
El paro se incrementó este trimestre en todos los sectores: en los Servicios sube en 91.300, en la Industria en 8.600, en la Agricultura en 7.600 y en la Construcción en 6.300. En el último año, acumuló un descenso de 458.900 desempleados, lo que supone un 10,8% menos que en el primer trimestre de 2017. Desde el peor momento de la crisis, a principios de 2013, el paro ha bajado en cerca de 2,5 millones de personas, según la EPA.
Sin embargo, una vez más, cuando se descuenta la estacionalidad, se observa que la tasa de paro continuó descendiendo en el primer trimestre (-0,5 puntos porcentuales), hasta situarse en el 16,1%, pero a un ritmo inferior, en todo caso, a lo que se esperaba.
Se trata, en definitiva, de un tropezón a nivel laboral, ya que, si bien es cierto que España sigue creando empleo y reduciendo el paro una vez que se elimina el efecto estacional, los datos registrados en el primer trimestre muestran una cierta desaceleración con respecto a las previsiones iniciales.