Durante el pasado mes de julio, las pernoctaciones en los establecimientos hoteleros de nuestro país se situaron en el entorno de los 42,6 millones de jornadas. Estas cifras confirman la desaceleración del turismo, puesto que representan un retroceso del 2,2% en comparación con los números del pasado año.
En total, las pernoctaciones han bajado más entre los turistas extranjeros que entre los visitantes nacionales. El descenso ha sido del 1,1% en el caso de los viajeros residentes en nuestro país, mientras que la caída para los no residentes se ha situado en el 2,7%. Así lo confirma el último informe de Coyuntura Turística Hotelera, publicado por el Instituto Nacional de Estadística.
La estancia media se ha mantenido más o menos estable. Seguimos en las 3,7 pernoctaciones por viajero, aunque la cifra que acaba de comunicar el INE refleja una pequeña corrección del 0,3%. Lo que sí es más preocupante es la tendencia observada de enero a julio: en los siete primeros meses de 2018, las pernoctaciones se redujeron un 0,7% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Andalucía, Comunidad Valenciana, Cataluña y Canarias son los destinos principales entre los viajeros residentes en España. La primera región acogió el 24% de las pernoctaciones de viajeros nacionales, mientras que la segunda se hizo con un 14,7%, la tercera sumó el 14,2% y la cuarta se anotó un 7,2%. Justo a continuación aparecen Galicia, con un 6,4% y la Comunidad de Madrid, con un 6,1%. Baleares cierra la zona alta de la tabla, con una cuota de mercado del 5,3%. En el extremo opuesto aparecen La Rioja, Navarra, Extremadura, Castilla-La Mancha y Murcia, todas con tasas que van del 0,5% al 2% de la distribución total.
El mapa es distinto entre los viajeros no residentes en nuestro país. Baleares arrasa con el 35% de las pernoctaciones de turistas extranjeros. La región insular viene de anotarse una subida del 1,1% en comparación con julio de 2017, una tasa relativamente pequeña que confirma la desaceleración de su sector turístico.
Los siguientes destinos de los no residentes son Cataluña (con el 20,7% del total de pernoctaciones y un descenso del 6,2%) y Canarias (con el 18,9% del total y una disminución del 5,4%). En el caso de Cataluña, los expertos achacan al desafío independentista una parte importante del deterioro del turismo. En Canarias, las voces autorizadas del ramo hablan de la reactivación de ciertos destinos turísticos del Mediterráneo como principal factor explicativo de la caída.
Turismo extranjero
Según el INE, en julio se cubrió el 71,1% de las plazas ofertadas, lo que supone un descenso anual del 2,4%. Los fines de semana, el grado de ocupación también arroja una caída: se sitúa en el 75,9%, un 0,9% menos que el pasado año. Las comunidades con mayor grado de ocupación son Baleares (89,5%), Canarias (80,7%) y Comunidad Valenciana (74%).
El boletín explica que "los viajeros procedentes de Reino Unido y Alemania concentran el 24,9% y el 19,9%, respectivamente, del total de pernoctaciones de no residentes en establecimientos hoteleros en julio". Esto significa que el mercado británico baja un 2,5%, mientras que el alemán retrocede un 11,4%. También se reducen las pernoctaciones de Países Bajos (un 8,7% menos) e Italia (un 3% menos), aunque Francia gana peso (con un 2,9% más).
Por categorías, la facturación media es de 219 euros para los hoteles con rango de cinco estrellas, mientras que este indicador es de 109 euros en los establecimientos con cuatro estrellas de calificación y de 88 euros en el caso de los hospedajes de tres estrellas.