La economía española, en diez gráficos
Ni paro, ni crecimiento del PIB, ni déficit público: esta vez hemos escogido diez gráficos poco habituales, pero que dan mucha información.
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Productividad y empleo de la mano de obra
España está en la mitad inferior de la OCDE en lo que respecta a la productividad. No es un resultado horrible, pero queda muy lejos de los mejores. Eso sí, si añadimos otro dato a este primero, la foto es mucho menos agradable: en cuanto al empleo de la mano de obra y el número de horas trabajadas, estamos en la cola del club de los países más ricos. Y no es porque nuestras jornadas laborales sean cortas: el empleo temporal y a tiempo parcial tienen mucho que decir en esta clasificación.
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Productividad e inversión
Dos gráficos clave para entender lo que ocurre en España. La productividad multifactorial sigue por debajo de su nivel del año 2000. Y la inversión en I+D y nuevas tecnologías está a la cola de la clasificación de los países más ricos. Si queremos darle la vuelta a la tortilla de nuestra economía, tendremos que empezar por aquí.
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Posición de inversión internacional
Podríamos decir que la Posición Inversora Internacional Neta (NIIP – en inglés) es lo que un país debe al resto del mundo en términos netos, sumando administraciones públicas, familias y empresas. España acumuló una enorme deuda en la primera década del siglo XXI, fruto de sucesivos y muy importantes déficits por cuenta corriente. Desde que llegó la crisis, esta situación se está revirtiendo (fruto de los esfuerzos del sector privado, no de los políticos, que siguen otro año más en números rojos). Es una gran noticia (y no siempre fue así) que estemos siendo capaces de salir de la crisis y, al mismo tiempo, desapalancarnos.
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Banca
La banca española se ha saneado desde los peores momentos de la crisis de 2010-2012, pero sigue estando en peligro. Sus coeficientes de capital son los más bajos de los sistemas financieros de la OCDE.
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Impuestos
Más allá de la discusión acerca de si los españoles pagamos pocos o muchos impuestos, este gráfico es muy interesante. Divide la carga fiscal entre los diferentes tipos de tributos. La conclusión: tenemos un sistema tributario que penaliza mucho el trabajo y no tanto el consumo. Por cierto, justo al contrario de algunos d esos países que siempre se ponen como ejemplo.
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Estado del Bienestar
La calidad de los indicadores del bienestar es bastante buena en muchos de los aspectos clave (sanidad, vivienda, seguridad, relaciones personales...). Somos un país con una muy elevada calidad de vida. ¿El punto negro en todas estas estadísticas?: el mercado laboral (y su derivada en desigualdad de ingresos), especialmente en lo que respecta a los jóvenes y a los trabajadores precarios. Por ahí es por donde debemos hacer los mayores esfuerzos.
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Paro y formación
En este gráfico, el gasto en formación de las políticas activas de empleo. Como vemos, España está en los niveles más bajos de la clasificación. En lo que tiene que ver con la lucha contra el desempleo, casi todo va destinado a subsidios a los desempleados o a incentivos a la contratación para las empresas. Y muy poco a formación de los parados.
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Formación de los trabajadores
Un gráfico que debería hacernos reflexionar: ESpaña es el tercer país de la OCDE en el que un mayor porcentaje de sus trabajadores no tiene el título de Educación Secundaria Superior (Bachillerato o FP Superior), el mínimo que los organismos internacionales creen que faculta para incorporarse con garantías al mercado laboral.
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Movilidad interna
Se habla poco de esto, pero es muy relevante en términos de empleo, productividad y creación de riqueza. El porcentaje de españoles que viven y trabajan fuera de su región de origen es muy bajo. Así, los movimientos entre regiones apenas sumaron el 0,3% de los puestos de trabajo cubiertos en la pasada década (sólo los griegos tienen una cifra inferior). Y si miramos otras estadísticas similares, los resultados serán muy parecidos. No nos gusta (o sentimos que no es posible, aquí el coste de la vivienda es un enorme obstáculo) movernos de casa, ni siquiera en busca de un empleo.
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Inmigración
No entramos en el debate de si hace falta más o menos inmigración. Pero lo que este gráfico demuestra es que los inmigrantes que han llegado a España en los últimos años están entre los que menos formación tienen (si los comparamos con los inmigrantes de otros países de la OCDE). Canadá, con una política inmigratoria muy selectiva (brazos abiertos pero sólo a los que entran en el cupo que establece el Gobierno) lidera esta clasificación.
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