La Comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados ha decidido cambiar los mínimos exentos en la Lotería de Navidad. De esta manera, los agraciados que reciban 10.000 euros no tendrán que tributar por el premio. En 2019, se subirá el mínimo a 20.000 euros y en 2020 a 40.000.
Además, los afortunados que lleven un décimo del Gordo tendrán exentos los primeros 10.000 euros. Así, los premios inferiores a 10.000, 20.000 y 40.000 euros en 2018, 2019 y 2020, respectivamente, estarán exentos de tributación y los que superen estas cifras lo harán a partir de ese nivel.
De esta manera, quienes tengan la fortuna de llevar un décimo premiado con 400.000 euros –4 millones de euros la serie– recibirán 322.000 euros, los 78.000 euros restantes van a parar a las arcas del Estado. La fórmula es sencilla, se aplica un 20% de tributos a los 390.000 euros –ya que los primeros 10.000 están exentos–. A partir de 2019, se aplicará el 20% sobre 380.000 euros y en 2020 el 20% sobre 360.000 euros. Es decir, los agraciados con el máximo premio este año pagarán en impuestos 78.000 euros, en 2019 pagarán 76.000 y en 2020, 72.000 euros. O sea: los premiados pasarán de recibir 322.000 euros libres de impuestos este año a 328.000 en 2020.
Hasta ahora, solo quedaban exentos de tributación los premios inferiores a 2.500 euros. De esta manera, los premiados con el Gordo de 2017 recibieron 318.000 euros y pagaron 82.000 en impuestos, mientras que este año recibirán 4.000 euros más por décimo con el máximo premio.
"La mecánica de tributación es sencilla, ya que es el mismo organismo de Loterías quien queda encargado del ingreso a Hacienda, de tal suerte que, cuando el afortunado reciba el premio, vendrá ya descontado el consabido 20% sobre la cuantía del premio que exceda de los primeros 2.500", explicaba Legálitas en un informe difundido el año pasado. Para este curso la mecánica es la misma, pero cambian los mínimos exentos.
Toda una fiesta para las arcas del Estado
El tradicional sorteo de la Lotería de Navidad aporta el 30% del total de lo recaudado por Loterías y Apuestas del Estado a lo largo del año. Esto supone algo más de 2.500 millones de euros cada 22 de diciembre. De ese dinero, unos 194 millones van a parar directamente a las arcas del Estado. Aunque es una cantidad que varía año a año, ya que los décimos premiados no vendidos son reembolsados al Estado.