"En este bar no se sirve Cacaolat": boicot a la firma de batidos

El boicot amenaza a Cacaolat, y no por iniciativa de los clientes, sino por parte de una serie de bares, restaurantes, tuiteros y hasta los CDR que animan a no consumir estos batidos. El objetivo de esta campaña es, supuestamente, defender a los trabajadores de la firma, aunque los resultados serán todavía más perjudiciales para la sostenibilidad del negocio.

Los empleados de la fábrica que la empresa catalana tiene en Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) están en huelga indefinida desde el jueves pasado. Piden mejoras en el calendario laboral para este 2019, optimizar las condiciones horarias del cuarto turno y la organización de la plantilla de producción durante los fines de semana en verano.

Después de que decenas de bares y restaurantes de Cataluña aparecieran con pizarras en las que anunciaban que no iban a servir más Cacaolat, CCOO y UGT han tenido que aclarar en un comunicado que "en ningún caso se ha pedido el boicot a la marca" porque "puede ocasionar consecuencias muy negativas para el conjunto de la plantilla". También se han apuntado al boicot negocios de otras partes de España.

CGT ha explicado que desde que se iniciara esta huelga indefinida, más de una veintena de bares y restaurantes de Santa Coloma de Gramenet, Badalona, Montcada i Reixach y Barcelona se han adherido "de forma espontánea" a una campaña que empezó con el anuncio de la Fábrica Restaurant Cap Foguer de no vender Cacaolat mientras no finalizara el problema.

Imitando a Podemos con el conflicto de Coca-Cola, que pedían el boicot a la marca de refrescos por el conflicto con los sindicatos y hasta que se prohibiera su venta en el Senado, los CDR también llaman a sus seguidores a no comprar los productos de la firma de batidos.