Menú

El PIB chino podría estar inflado hasta en un 12%

Como el error se va arrastrando de un año a otro, la distancia entre la contabilidad y la realidad económica va creciendo

Como el error se va arrastrando de un año a otro, la distancia entre la contabilidad y la realidad económica va creciendo

A lo largo de los años, las cuentas públicas de la República Popular China han sido cuestionadas por diversos expertos. Hace casi tres lustros, el escritor francés Guy Sorman resumió de forma brillante las tesis de los más escépticos en su magistral ensayo El año del gallo. Más recientemente, publicaciones como The Economist, entidades como Citigroup y economistas como Niels Jensen ofrecieron nuevas estimaciones, tomando como referencia indicadores adelantados, cifras de consumo eléctrico, revisiones de la metodología empleada para calcular el PIB…

Pero quizá el trabajo más interesante que se ha realizado en los últimos años es el análisis forénsico de la contabilidad oficial que ha elaborado recientemente un grupo de expertos de la Institución Brookings, uno de los think tanks más importantes de Estados Unidos. De acuerdo con el grupo de trabajo, las discrepancias son tan significativas que el tamaño del PIB chino estaría inflado hasta un 12%.

¿Cómo se explica semejante brecha? De entrada, es importante aclarar que las cifras nacionales de producción económica se construyen con datos ofrecidos por los gobiernos locales, que a su vez tienen incentivos para presentar cifras consistentes con los planes del Ejecutivo central. Como el error se va arrastrando de un año a otro, la distancia entre la contabilidad y la realidad económica va creciendo.

La falta de realismo de los datos de producción local ha hecho que la Oficina Estadística Nacional de China adopte mecanismos orientados a matizar esta tendencia a la sobreestimación del crecimiento. Estos cambios no son menores: desde mediados de los 2000, el ajuste medio es del 5% del PIB. Hay importantes diferencias en cuestiones como la producción industrial, la inversión, etc. De modo que, desde un primer momento, el proceso está viciado.

La contabilidad, cada vez más cocinada

No obstante, desde el año 2008 se ha producido un deterioro notable en la calidad de los datos ofrecidos por los gobiernos locales, probablemente porque la producción del gigante asiático ha acusado el impacto de la Gran Recesión en Occidente.

En consecuencia, los expertos de la Institución Brookings han revisado los datos locales y nacionales de producción, con estimaciones ajustadas de la evolución de la industria, el comercio, la inversión... Para hacerlo, han acudido a todo tipo de fuentes, desde boletines de consumo eléctrico a informes de recaudación por IVA.

Tras corregir los datos, la estimación de la tasa media de crecimiento para 2008-2016 se ve reducida en 1,7 puntos, mientras que la suma de la tasa de ahorro y la inversión experimenta un retroceso de 7 puntos. En términos reales, la expansión del PIB chino sería un 2% menor cada año. Considerando todo el período estudiado, la economía china sería hoy un 12% más pequeña de lo que cuentan las cifras oficiales.

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios