Amazon es una empresa que está en constante evolución haciendo incursiones en negocios de todo tipo. Hace unos meses la compañía de Jeff Bezos se planteó la posibilidad de entrar en el sector inmobiliario, algo que hizo tambalear los cimientos de las grandes agencias. Finalmente, y por el momento, el gigante del comercio electrónico no ha dado ese paso, pero ha comenzado a vender sus propias casas.
Se trata de casas prefabricadas que pueden ser instaladas en el jardín. Lo ha hecho de la mano de la compañía nórdica Allwood, y ya están disponibles hasta cuatro modelos distintos. El estándar es el llamado Allwood Solvalla, que tiene 16 metros cuadrados, pesa 1.125 kilos y cuesta 5.800 euros. Aunque lo que más caracteriza a este modelo es que se puede montar en solo ocho horas.
Otro de los modelos más vendidos es el Allwood kit de escape Lillevilla, que tiene 10 metros cuadrados y cuesta 3.900 euros. Pero si realmente estamos buscando una casa para instalarla en un nuevo terreno, el mejor modelo es el Allwood Eagle Point, que tiene 66 metros cuadrados y dos pisos. Las ventanas son de cristal y cuenta con baño y cocina completa. Por 42.000 euros se puede tener un chalet made in Amazon.
De hecho, tanto éxito están teniendo estas casas prefabricadas que, a las pocas horas de salir, algunos modelos quedaron agotados, aunque Amazon ya ha conseguido volver a tener stock. Las casas prefabricadas están en auge y son una tendencia por la rapidez de su construcción y por el ahorro económico. De hecho, en la India una alternativa que están siguiendo muchos jóvenes es la de construir casas de bambú dentro de las ciudades.
El problema que puede tener Amazon a la hora de vender estas casas es su envío. Para ello, la compañía de Bezos acaba de poner la primera piedra de su primer aeropuerto, que se desarrollará en Cincinnati. Allí, el gigante del comercio electrónico creará una planta logística que le permitirá realizar hasta 200 vuelos al día para entregar con mayor rapidez estos pedidos más difíciles de transportar.