Desde mediados de marzo, cuando se decretó el estado de alarma, el Gobierno ha llevado a cabo la compra de, al menos, 9.577 dispositivos electrónicos, especialmente ordenadores portátiles y tablets, para que los funcionarios puedan trabajar desde sus domicilios. Según El Independiente, el coste total ha sido de unos siete millones de euros, lo que supone un precio medio por dispositivo de 730 euros. Por tanto, se trataría de ordenadores y tabletas de gama media-alta. Aunque la cantidad de unidades es aproximada ya que no se ha detallado la totalidad de estas adquisiciones ni el precio exacto de las mismas.
Para adquirir estos productos, se contactó con una treintena de proveedores distintos, siendo el más solicitado Inforein SA, una compañía que se dedica a suministrar, instalar y prestar servicios electrónicos. En total, la empresa madrileña se embolsó 1,57 millones de euros por esta partida extra. En el caso del Ministerio de Defensa, los encargos fueron de 425 HP Probook. De los veintidós ministerios, solo dos (Consumo e Igualdad) aseguran no haber realizado compras de dispositivos electrónicos para que sus funcionarios teletrabajaran. Además de estos dispositivos, el Ejecutivo también ha tenido que contratar diferentes servicios para poder llevar a cabo reuniones telemáticas con seguridad recurriendo a plataformas cifradas.
Solo en el mes de abril el Gobierno gastó 3,2 millones de euros en comprar ordenadores, material electrónico, softwares y webcams para poder teletrabajar. En total, de esta partida 966.237 euros fueron para el Ministerio de Hacienda, que actualmente ya tiene habilitadas varias opciones para realizar diferentes tipos de consultas a través de Zoom.
La partida de 7 millones de euros en más de 9.500 dispositivos parece razonable, sobre todo teniendo en cuenta lo que gasta el Senado en dotar a los senadores de un kit tecnológico compuesto por una tableta y un teléfono móvil. En el mes de febrero, la Cámara Alta gastó 1,25 millones de euros en comprar iPhones y iPads para todos sus miembros. En total, la compras de tablets supusieron un desembolso de 358.392 euros y la de los móviles, con 25 meses de línea incluida de Orange, 896.152 euros.