El año 2020 ha sido tremendamente excepcional. Solamente España ha perdido 43 millones de turistas y casi 56.000 millones de euros debido a la pandemia generada por la covid-19. Esta situación ha hecho que los hoteles reduzcan sus precios de forma considerable, tanto es así que en estos momentos resulta más barato vivir en algunos hoteles que alquilar un piso. Es más, son los propios establecimientos los que están fomentando este tipo de ofertas de arrendamientos a largo plazo.
Las ofertas más comunes ofrecen estancias de, como mínimo, un mes con servicio de limpieza, uso de zonas comunes, Internet, cambio de sábanas y toallas y servicio de aparcamiento, entre otras cosas. Por esto, el precio medio suele ser de 500 euros por persona, que puede subir hasta los 1.000 euros al mes si se eligen otros servicios como el desayuno y la comida o la cena, es decir media pensión.
La cadena Campanile es una de las que han apostado por esta fórmula para sus siete establecimientos de España. "Estancias largas siempre ha habido, de clientes que pernoctaban aquí de lunes a jueves, pero ahora lo que hay es una nueva forma de pensar. Mucha gente teletrabaja desde casa pero no tiene las condiciones necesarias para hacerlo, y muchos nos han llamado para alquilar la habitación como oficina", explica Cristina Gómez, directora del hotel de Alcalá de Henares a Telemadrid. El precio concreto para este establecimiento de tres estrellas es de 600 euros mensuales y de 900 en caso de que se alquilen dos habitaciones comunicadas, ambas con servicio de limpieza.
Pero no es la única firma. B&B Hoteles, que cuenta con 39 establecimientos en España, también ha lanzado una oferta similar por 500 euros al mes. "Será más barato que alquilar una casa y sin firmar ningún contrato de arrendamiento, fianzas o avales", explicaba Lucía Méndez-Bonito, CEO de B&B Hotels en España y Portugal al portal Brainsre.
En cuanto a la legalidad, este tipo de estancia está regulada en parte por los artículos 1.783 y 1.784 del Código Civil, y en otra parte, por creación Doctrinal y Jurisprudencial. Por tanto, con la normativa en la mano, las cadenas hoteleras pueden hacer uso de estas ofertas para sobrellevar la crisis y atraer nuevos clientes.