Los grandes actores del mercado inmobiliario, incluido el Gobierno central y el de las comunidades autónomas, coinciden en la necesidad de un parque de alquiler que pueda dar salida a las necesidades reales de la población, que garantice el acceso a la vivienda y que lo haga a un precio asequible. Consideran, además, que la disponibilidad de más vivienda de alquiler sería una de las soluciones más efectivas para regular los precios en ciudades especialmente tensionadas, como por ejemplo Madrid o Barcelona.
Debido al miedo a la regulación de precios y a la crisis por la Covid-19, que ha provocado que muchos propietarios se hayan quedado sin ingresos —y sin la garantía de recuperarlos pronto—, la retirada de inmuebles del mercado del alquiler es una realidad patente.
Esto se suma a los miedos heredados. ¿Dejará el inquilino el piso tal y como lo encontró? Si se queda sin trabajo, ¿seguiré cobrando las rentas? ¿Quiénes y cómo pueden ayudarme si necesito asesoramiento jurídico? La respuesta está en los seguros de impago del alquiler, una fórmula que ha ganado adeptos en el último año. Tanto es así, que según las previsiones del Observatorio Español del Seguro de Impago de Alquiler (OESA), más del 30 % de los contratos de alquiler que se firmen en 2021 incluirán seguros de impago.
Pero, ¿merece la pena contratarlos? ¿Qué ventajas pueden ofrecer siendo propietario y teniendo previsto alquilar una vivienda? El portal de viviendas pisos.com proporciona las claves y aspectos más importantes de estos seguros.
Seguirás cobrando el alquiler pase lo que pase
Muchos propietarios contratan un seguro de impago del alquiler porque creen que lo peor que les puede pasar es que el arrendador no pague la renta acordada, bien porque se ha quedado sin ingresos, bien porque no ha sido responsable. Sin embargo, Unespa, la patronal del sector de los seguros, afirma que los impagos en realidad solo se dan en poco más de un 6 % de los casos. Lo que sí suele producirse más a menudo (93 %) son daños en las viviendas alquiladas.
En cualquier caso, un seguro de impago del alquiler garantiza al asegurado el cobro de las rentas mensuales del alquiler si el arrendatario no hace frente a su responsabilidad. A la hora de contratar es importante verificar el periodo o el número de cuotas de las que se hará cargo la aseguradora, con el fin de no llevarse sorpresas más adelante.
Estarás protegido frente a actos vandálicos
La mayor parte de seguros de impago del alquiler también ofrecen a los asegurados protección ante daños, pérdidas o robo de elementos que forman parte de la vivienda. El límite del que se hace cargo la aseguradora se indica en las condiciones personales de la póliza, así que es muy importante comprobar de qué cantidad se trata antes de firmar.
Esta cláusula es fundamental para no llevarse sustos en caso de desahucios u otras situaciones que hayan generado tensiones en la relación entre arrendador y arrendatario, pues aunque no es lo más común, pueden darse desperfectos de esta clase en la vivienda. Y al final terminan saliendo muy caros al propietario.
Contarás con asistencia jurídica si lo necesitas
Al contratar un seguro de impago del alquiler, lo hacemos por si algo no sale bien, en este caso, el contrato de alquiler. En este tipo de productos suele estar incluida la asistencia jurídica, de modo que no hay que desembolsar más dinero si toca ir a juicio con el inquilino.
A la hora de contratar hay que asegurarse del tipo de cobertura que ofrece nuestro seguro de impago del alquiler. Lo más habitual es que se proporcione asesoramiento jurídico telefónico para cualquier duda que pueda surgir mientras esté vigente el contrato, redacción y revisión de documentos legales, peticiones de desahucio, reclamaciones por incumplimiento, defensa penal, jurídica o de responsabilidad civil.
Tendrás garantizado el mantenimiento en la vivienda
Al igual que la mayoría de seguros, los de impago del alquiler también ofrecen a los propietarios algunas protecciones adicionales u opcionales, como por ejemplo el mantenimiento de la vivienda. Esto permite asegurar cualquier reparación en el inmueble, especialmente si es responsabilidad del arrendador. Si contratas esta garantía, tendrás un técnico a domicilio reparando los desperfectos, lo que sin duda supondrá un ahorro en reparaciones inesperadas, que son las que suelen resultar más costosas.
Otras ventajas añadidas a los seguros de impago del alquiler son la responsabilidad civil (tanto del arrendador como del inquilino), conexiones directas con profesionales, sustitución de cerraduras o limpieza, ya sea porque se ha producido un desahucio o porque, tras la finalización del contrato de arrendamiento, el inquilino no ha dejado la vivienda en perfecto estado.
Estarás tranquilo al cien por cien
Un seguro de impago del alquiler es una solución legal que puede ofrecer toda la tranquilidad que necesitamos a la hora de poner una vivienda en el mercado de alquiler. Además de proteger frente a impagos, proporciona la certeza de estar protegido frente a actos vandálicos, desperfectos e incluso averías en el hogar.
Antes de contratar, es recomendable comparar entre seguros y estudiar bien cada una de las propuestas, con el objetivo de elegir el seguro de impago del alquiler que más se ajuste a nuestras necesidades y circunstancias.