Menú
EDITORIAL

La burla económica del Gobierno

Que el Gobierno siga enrocado en unas estimaciones de crecimiento tan delirantes ante el descrédito de la comunidad económica es un escándalo.

No queda un organismo ni una casa de análisis que no haya tumbado las previsiones económicas del Gobierno para este año y los venideros. El último tijeretazo se ha producido esta semana, cuando la OCDE ha hundido del 6,8 al 4,5% la estimación del crecimiento del PIB de España este año. Para 2022, los cálculos de la OCDE también son desmoralizadores: el crecimiento del PIB apenas alcanzará el 5,5% el año que viene, lo que supone un descenso de 1,1 puntos respecto a la anterior estimación. Esto significa que España no recuperará el nivel de crecimiento previo a la pandemia, por lo menos, hasta el primer trimestre de 2023. De esta manera, estaríamos asistiendo ante un desastre económico sin parangón entre los países desarrollados.

Sin embargo, en el área económica del Ejecutivo continúa la farsa. El optimismo exacerbado de Sánchez, Calviño, Montero o Díaz durante toda la crisis del coronavirus se ha convertido ya en una auténtica tomadura de pelo. A pesar de que el INE, el FMI, Caixabank, Funcas, la Airef, la Comisión Europea y una veintena de instituciones más han tumbado uno a uno sus insostenibles números, el Gobierno no mueve ni un ápice sus previsiones y sigue insistiendo en que la economía española va a crecer un 6,5% este año. No puede haber más ficción en esta previsión, ni tampoco en las propias palabras de Calviño, que afirmaba hace unos días, sin vergüenza: "España será uno de los motores del crecimiento en Europa". El ridículo es mayúsculo.

Y es que, con la rebaja al 4,5% del PIB, se truncan también las esperanzas de que nuestro país lidere este año la recuperación, como preveía la OCDE y tanto presumía el Gobierno. De todas formas, de haber sido así, no estaríamos ante ningún hito con el que sacar pecho, ya que España tuvo el deshonor de ser la economía que más cayó en 2020, por lo que ser ahora la nación de mayor crecimiento no hubiera sido más que un mero espejismo propio del efecto rebote. Pero es que ni eso: España seguirá estando en el vagón de cola.

Que el Gobierno siga enrocado en unas estimaciones tan delirantes ante el descrédito de la comunidad económica es un escándalo, sobre todo teniendo en cuenta que esas previsiones son las bases sobre las que se han cimentado los Presupuestos de 2022. Estas cuentas ya no tienen ninguna credibilidad, pero hasta que el Ejecutivo no se vea obligado a rectificar su desfasado cuadro macro –que lo hará– sirven de perfecta excusa para seguir dilapidando, sin control, el dinero de los contribuyentes, sin aplicar, además, ni una sola medida de ajuste.

Pero la evolución del PIB no es la única falsedad económica que está propagando el Gobierno. Maestros de la mentira y de la manipulación, no dudaron en desmentir la crisis del coronavirus y ahora también niegan la desaceleración del crecimiento, y hasta se atreven a subestimar la inflación. Con un IPC que ha escalado en octubre al 5,6%, nos encontramos ante la mayor subida de precios desde hace casi 30 años; pero al Ejecutivo social-comunista le parece que "no es exorbitante" y la califica de "transitoria", adjetivo que ya ha fulminado la Reserva Federal de su discurso y pide que erradiquen todos los países. ¿La razón? La evidente subida generalizada de los precios en la mayoría de los productos que devora la economía y los ahorros de las rentas medias y bajas. Eso sí, mientras la inflación detrae poder adquisitivo y ahoga a los contribuyentes, Hacienda llena sus arcas con este impuesto en la sombra.

No debemos olvidar tampoco que el Gobierno sigue practicando el arte de maquillar la economía con los datos de empleo. Este jueves, el triunfalismo del Ejecutivo con las cifras del paro fue tan exagerado que no hacía falta más que introducirse un poco en los números para evidenciar que la creación de empleo público y la afiliación en la Comunidad de Madrid es lo que está salvando el márketing laboral de Sánchez. ¿Hasta dónde serán capaces de llegar con esta burla económica?

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios