Hay unas 120.000 personas con parálisis cerebral en nuestro país, con una incidencia de entre 2 y 2,5 casos por cada mil nacimientos. Cada uno es diferente, pero una problemática muy común entre los afectados es la espasticidad, un trastorno motor que provoca un aumento del tono muscular dificultando o imposibilitando por completo el movimiento de los músculos que lo sufren.
Claudia Tecglen es una de las afectadas por una parálisis cerebral espástica. Nació tres meses antes de lo previsto, el 12 de septiembre de 1986. El diagnóstico para sus padres fue demoledor: la niña, que nació con un peso de sólo 900 gramos, sería para siempre "un vegetal".
Con el apoyo de unos padres que se negaron a aceptar un diagnóstico equivocado, los mejores tratamientos y sobre todo una inquebrantable fuerza de voluntad, Claudia fue rompiendo poco a poco todos los pronósticos y cumpliendo sueños que parecían imposibles.
A los tres años ya hablaba y escribía, y a los cinco empezó a hablar en inglés. Hace catorce años fundó la asociación Convives con Espasticidad, para ayudar a quienes padecen un trastorno asociado a múltiples enfermedades, además de la parálisis cerebral, como ictus, espina bífida o esclerosis múltiple. Y hace sólo unos días, recibió el Premio de la Fundación Princesa de Girona por su labor, para la que ha tenido el apoyo de Fundación Banco Santander.
De su trayectoria, ella destaca que es la protagonista de su vida, un sueño cumplido más que se ha sumado a los muchos tabúes que ha derribado desde que era niña. Hoy Claudia es psicóloga, conferenciante, consultora estratégica y de comunicación especializada en entidades sin ánimo de lucro y ayuda a otras personas a seguir cumpliendo sueños.