El culebrón que protagonizan el Consejero Delegado de Tesla y Space X, Elon Musk, con Twitter escribe un nuevo capítulo después de que el magnate anunciara la compra de la famosa red social. Este viernes se hace público que Musk ha anunciado ya a los inversores de Twitter que planea recortar casi el 75% de la plantilla. Al menos, así lo recoge The Washington Post.
Algunos analistas que siguen de cerca al magnate del coche eléctrico y los viajes espaciales señalan que este tipo de filtraciones provienen, con casi total seguridad, de las presentaciones que Musk está haciendo con potenciales inversores a los que traslada sus planes en Twitter.
El analista de Numantia Patrimonio Global, Emérito Quintana, gran conocedor de Musk e inversor en Tesla desde el vehículo que capitanea, considera, como el propio Musk, que comprar Twitter al precio pagado (44.000 millones de dólares), resulta caro, pero "sólo si dejas a Twitter tal y como está". Sin embargo, Musk ya ha referido en alguna entrevista que quiere convertir Twitter en el Wechat de occidente.
Wechat es el gigante chino de las aplicaciones móviles. Ofrece en la misma aplicación todas las redes sociales, comunicación instantánea y la red de contactos. Permite hasta la posibilidad de pagar facturas o enviar dinero. Prácticamente todo lo que se puede hacer, está en una sola aplicación. En China tiene cerca de 1.000 millones de usuarios.
Pues bien, los planes de Musk pasan por convertir a Twitter en el Wechat occidental lo que permitiría, según sus cálculos multiplicar por 10 su inversión. Y según algunas fuentes este es el empeño en el que ya tendría convencidos a algunos inversores de renombre como Baron Funds o Brookfield.
Quintana, además, cuenta a Libre Mercado que Musk es un fanático de la eficiencia y trata de llevarla a efecto en todos sus proyectos, lo que encaja con el mensaje filtrado sobre el despido del 75% de la plantilla. "A Elon Musk no le gusta nada la ineficiencia y la burocracia en las empresas. Él lo que quiere es que cada ingeniero trabaje para aportar valor y productividad al proyecto", señala Quintana.
La supuesta ineficiencia de Twitter y la estrategia de su junta directiva han sido objeto de chascarrillo en el sector durante años. El propio creador y fundador de la red social del pajarito, Jack Dorsey hablaba de la junta directiva como "la parte más disfuncional de la compañía".
Siempre se ha atribuido a esta junta directiva el objetivo de estar siempre a la defensiva, intentando no hacer nada para que nada cambiase, y por eso ha sido tradicionalmente ineficiente.
En concreto, Musk estaría dispuesto a despedir a 5.500 empleados, dejando la plantilla en poco más de 2000 trabajadores. Con todo, los recortes no sólo van a afectar a los trabajadores, sino también a las infraestructuras de la compañía y a los centros de datos que permiten el funcionamiento de la red.
Musk tiene de fecha hasta el próximo 28 de octubre para cerrar la adquisición de Twitter si quiere evitar ir a juicio con la compañía, tras lo que el empresario e ingeniero expresó su intención de adherirse al acuerdo original de comprar Twitter por 54,20 dólares por acción, que implicaría un total de 44.000 millones de dólares (44.880 millones de euros).