Toda cara tiene una cruz. Si la época del dinero gratis ha traído créditos extraordinariamente baratos para todo aquel que supo verlo, las subidas de tipos de interés puede traer de vuelta la remuneración de los depósitos bancarios, algo que a las generaciones más jóvenes les resultará desconocido.
Sí, los bancos comienzan a pagar a sus clientes por captar pasivo, es decir, por el ahorro, por los depósitos. De momento es algo muy puntual, que están capitaneando algunos bancos extranjeros y la banca digital. Para las grandes entidades, el pago se produce en casos especiales, de grandes clientes o clientes de banca privada, con remuneraciones que oscilan entre el 2% y el 3%.
Alta liquidez
De momento, la banca tradicional no tiene demasiado interés en iniciar una guerra por los depósitos, ya que sus niveles de liquidez todavía son altos. Además, tal y como recuerdan, siguen existiendo productos con baja volatilidad (y rentabilidad contenida) que pueden hacer las veces de depósito a los clientes pero con algo más de rentabilidad que éstos.
Además, estas mismas entidades también recuerdan que no cobraron a los clientes por los depósitos cuando los tipos de interés eran negativos.
Sin embargo, parece que es cuestión de tiempo que la banca generalice la remuneración de los depósitos en sintonía con lo que ha pedido Christine Lagarde, presidenta del BCE, quien mostró hace algunas semanas su expectativa de que los bancos comiencen a trasladar a los depósitos el alza de tipos de interés en la zona euro. En nuestro país, el Banco de España coincide en que es inminente el regreso a la rentabilidad, por pequeña que sea, de estos productos.
Banca digital
De momento, los bancos extranjeros y aquellos que operan sólo en digital, han comenzado tímidamente a ofrecer algo de rentabilidad por los ahorros depositas por los clientes. Según el comparador Rankia, entre las ofertas más destacadas en abril está un depósito a 12 meses de EBN que ofrece un 2,55 % TAE; el depósito a 12 meses de Avantio, con un 2,3 %, y uno a 18 meses de Wizink, que da un 3 % TAE.
En el continente europeo encontramos opciones más interesantes, como la del del portugués Haitong Bank, al 3,51% a dos años, o el de Banca Progetto, 3,49%, también a dos años. Unas rentabilidades que prácticamente igualan a las letras del tesoro a un año.
Al margen de los depósitos, también hay cuentas remuneradas que ofrecen rentabilidades interesantes como la Cuenta Online de Sabadell, con la que se puede conseguir hasta un 2% el primer año; la Cuenta Remunerada de MyInvestor o la Cuenta Nómina de Bankinter, con un 5% el primer año.
Cada vez menos depósitos
Sin embargo, la realidad es que la crisis de precios que sufrimos en España desde hace más de un año, con una inflación desbocada en el entorno del 8% con brutales encarecimientos de las hipotecas, los consumos energéticos y la cesta de la compra está haciendo que las familias pierdan sus ahorros. Así, han reducido el saldo de sus depósitos. Los últimos datos de los que se tienen conocimiento, y que corresponden al mes de febrero, señalan que se retiraron 5.000 millones de euros en depósitos, que se suman a los 13.000 retirados en enero. Lo que hace un saldo de 18.000 millones de euros en dos meses.
El motivo detrás de esta gran retirada de depósitos es doble. Por un lado, disponer de más liquidez para hacer frente al fuerte encarecimiento de la vida y por otro, colocar esos ahorros en productos más rentables. En febrero, el total de depósitos de las familias españolas era de casi un billón de euros, un 2,2% más que un año antes.
En cualquier caso, y pese a las tensiones y el miedo que se ha experimentado en el arranque del año al estallido de una nueva crisis financiera, desde las autoridades financieras indican que la salida de depósitos ha sido más bien traslado, y no significativa. Según ha dicho recientemente el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, la inflación está "atacando a las rentas de familias y empresas, que se ven abocadas a tirar de sus ahorros, lo que contribuye a reducir el volumen de depósitos de la banca española".
Siguen perdiendo dinero
La diferencia entre la inflación que sufrimos y la nula o escasa rentabilidad que ofrecen los productos en los que está metido la mayor parte del ahorro de los españoles lo que habla es de una fuerte pérdida de este poder adquisitivo. Con una inflación media real instalada en el entorno del 8% (los últimos datos del INE apuntan a una inflación subyacente encastillada en el 7,5%), los ahorros que estén metidos a rentabilidades de entre el 2% y el 3%, lo que supone perder entre el 5% y el 6% por el efecto pernicioso de la inflación.
La escasa cultura financiera de nuestro país hace que la mayoría de los ahorros de los contribuyentes españoles estén en productos que ofrecen una muy escasa o nula rentabilidad y sufran el desgaste inevitable de la inflación y eso que en los últimos meses se ha disparado la contratación de fondos de inversión en nuestro país hasta superar los 300.000 millones según los datos de Inverco.