Carlos Mazón, candidato del PP a la presidencia de la Comunidad Valenciana, ha presentado una rebaja fiscal con la que pretende reducir en 1.750 millones de euros los pagos asumidos por los contribuyentes de la región en concepto de IRPF. El ciudadano medio pagaría un 10% menos, viendo aumentar sus ingresos por dicho monto, si bien el ahorro podría llegar a ser del 40%, al contabilizar determinadas deducciones.
Las medidas que ha anunciado Mazón suponen una rebaja general a todos los ciudadanos y se concentran en la tarifa regional del Impuesto sobre la Renta. En caso de aprobarse, beneficiarían especialmente a las rentas bajas y medias. Además, la propuesta del PP de la Comunidad Valenciana contempla una simplificación de los tramos autonómicos, que pasarían de once escalones comprendidos entre el 9% y el 29,5% a siete niveles baremados entre el 8,75% y el 24,5%.
Uno de los aspectos centrales de la rebaja fiscal es el que pretende poner fin al carácter confiscatorio que ha adquirido el tramo superior del impuesto bajo gobierno de Ximo Puig. En la actualidad, Comunidad Valenciana aplica una fiscalidad regional tan alta que, al combinar la tarifa autonómica con la nacional, la retención llega al 54%.
Los umbrales que fija Mazón como referencia para su reforma son los siguientes:
De acuerdo con este planteamientos, todos los niveles de renta pagarían menos y las grandes beneficiadas serían las personas que declaren una base liquidable de hasta 35.000 euros. Además, un 80% de los contribuyentes se situaría en niveles de tributación especialmente bajos, similares a los que se aplican en la Comunidad de Madrid.
Por otro lado, los populares plantean las siguientes deducciones:
- Deducción de entre 350 y 600 euros para mayores de 65 años con descendientes a su cargo.
- Deducción de 250 euros para los autónomos de entre 35 y 50 años que se den de alta como autónomos.
- Deducción de entre 150 y 250 euros por contratación del primer trabajador a sueldo de un autónomo.
- Deducción de hasta 250 euros por inversiones realizadas en un negocio.
- Deducción de hasta 300 euros para personas que necesiten ayuda por problemas de salud mental.
- Deducción de hasta el 200 euros por gastos familiares asociados a enfermedades crónicas de alta complejidad.
- Deducción de entre 200 y 300 euros por gastos familiares asociados a problemas de daño cerebral adquirido o alzheimer.
- Deducción de 300 euros por los gastos familiares en salud bucodental.
- Deducción de 200 euros por los gastos familiares de salud visual (compra de gafas, graduación de lentes, etc.).
- Deducción de hasta 300 euros para los gastos asociados a prácticas deportivas.
Además, Mazón considera que "la situación asfixiante de las familias valencianas no solo nos obliga a tomar estas medidas, sino que también debe invitarnos a abordar nuevas rebajas a lo largo de la legislatura, manteniendo una política de revisión fiscal permanente, para tratar de adecuar los impuestos a la realidad y a las necesidades de los ciudadanos".