Por mucho que se empeñe el Gobierno en cacarear los buenos datos de inflación, lo cierto es que éstos siguen estando altísimos y rwprueba de ello es la inflación subyacente que sólo sufre una ligera moderación hasta el 6,1% en tasa interanual, y sólo gracias a una muy ligera contención en los precios de los carburantes, alimentos y bebidas no alcohólicas.
Sin embargo, el Gobierno celebra que el IPC adelantado del mes de mayo se sitúa en el 3,2%, nueve décimas menos que la tasa interanual registrada en el mes de abril y que ascendía al 4,1%. Pero nada más lejos de la realidad ya que esta moderación se debe, fundamentalmente a un efecto escalón por las tasas alcanzadas en mayo del año pasado (el 8,7%).
La evolución de la inflación, al ser éste un dato acumulativo, se ve mejor si hacemos el cómputo, por ejemplo, de los dos últimos años. Así, en los dos últimos años los precios han sufrido un alza del 11,9%, sólo ligeramente inferior al cómputo de los dos últimos años del mes de abril, cuando sumaban 12,4%. Es decir, que la moderación en mayo es de apenas medio punto, y sigue encastillada en rangos muy altos, por encima del 10%, casi triplicando el objetivo anual del 2% que persiguen los bancos centrales.
Prueba de que la inflación sigue muy alta es la subyacente, donde la moderación es la misma que en el cálculo anterior, medio punto. En cuanto a la evolución mes a mes, el IPC adelantado de mayo cae un 1% respecto al mes de abril. No será hasta el mes próximo cuando conozcamos el dato definitivo de IPC correspondiente al mes de mayo.
Sin embargo, el efecto escalón en el dato del IPC adelantado que ofrece el INE y que da como dato de inflación el 3,2%, es aprovechado por el Gobierno para sacar pecho: "confirman la eficacia de las medidas del Gobierno (...) La moderación de los precios de los alimentos y la caída de los carburantes posicionan a nuestro país como uno de los que tienen la inflación más baja de la UE", ha dicho Nadia Calviño.