Menú

¿Petróleo a 150 dólares? La guerra en Oriente Medio reaviva la crisis de los 70

El Banco Mundial y el Banco de España avanzan fuertes subidas del petróleo y la inflación si la guerra entre Israel y Hamás se extiende.

El Banco Mundial y el Banco de España avanzan fuertes subidas del petróleo y la inflación si la guerra entre Israel y Hamás se extiende.
Plataforma petrolífera. | Pixabay/CC/eyeonicimages

Más de 150 dólares por barril. Ese es el precio del petróleo que estima el Banco Mundial en caso de que la guerra que libran Israel y Hamás en Gaza se recrudezca y, finalmente, acabe extendiéndose a otros países de Oriente Medio.

En su último informe sobre Materias Primas, el organismo señala que la economía mundial está mejor preparada que en los años 70 para hacer frente a nueva crisis del petróleo, con fuertes alzas de precio, como consecuencia de la caída de la producción y restricciones en el suministro derivadas de la tensión bélica, pero todo dependerá de la intensidad que alcance la guerra.

El crudo se mantendrá en un precio medio del 90 dólares por barril e incluso descenderá hasta el umbral de los 80 el próximo año debido a la desaceleración económica mundial, siempre y cuando el conflicto en Gaza no se extienda más allá. No en vano, el precio tan sólo ha subido un 6% desde el estallido de la guerra.

Pero, al mismo, tiempo, el Banco Mundial dibuja tres posibles escenarios en función de la evolución bélica tomando como referencia la dura crisis del petróleo sufrida en la pasada década de los 70. Todo dependerá de la interrupción del suministro del petróleo desde los países productores, ubicados en Oriente Medio, hacia los principales consumidores de Europa, América y Asia.

En un primer escenario de "escasa interrupción", el suministro mundial bajaría entre 500.000 y 2 millones de barriles diarios, similar a la reducción observada durante la guerra civil de Libia en 2011. En este caso, su precio subiría entre un 3% y un 13% con respecto al promedio del trimestre actual, oscilando así entre los 93 y los 102 dólares por barril.

En un escenario de "interrupción media", similar a la registrada durante la guerra de Irak en 2003, el suministro caería entre 3 y 5 millones de barriles diarios. Y el precio, como resultado, aumentaría entre un 21% y un 35%, oscilando entre los 109 y los 121 dólares por barril.

Mientras que en un tercer escenario de "interrupción considerable", equivalente al embargo decretado por los países árabes en 1973, el suministro se hundiría entre 6 y 8 millones de barriles al día, disparando los precios entre un 56% y un 75%, de modo que el barril pasaría a costar entre 140 y 157 dólares.

pet701.png

El informe explica que, hoy por hoy, la economía mundial puede absorber mejor el impacto que en los años 70 debido a que la cantidad de petróleo necesario para generar 1 dólar de PIB se ha reducido a más de la mitad.

Además, ha aumentado el número de países exportadores y la dependencia energética del oro negro es menor por la irrupción de las renovables. Pero, aun así, los gobiernos deben permanecer "alerta" porque, si el conflicto se intensifica, la subida del petróleo se traducirá también en una nueva escalada de la inflación.

pet702.png

Escenario "preocupante"

El Banco de España coincide, en gran medida, con el diagnóstico del Banco Mundial. En su último informe de Estabilidad Financiera, advierte de que una extensión del conflicto entre Israel y Hamás hacia otros países de la región, como Arabia Saudí, Irán, Iraq o Catar, podría causar en los mercados energéticos efectos "más importantes" que los experimentados hasta la fecha.

Un escenario "especialmente preocupante" sería el bloqueo de corredores estratégicos y avisa de que un hipotético incremento de los precios de la energía supondría una "nueva perturbación" para la economía mundial, con posibles nuevos aumentos de la inflación que podrían llevar a un tono más restrictivo de las políticas monetarias. Es decir, a nuevas subidas de los tipos de interés para tratar de contener los precios.

pet703.png

Aunque, de momento, las tensiones actuales en Oriente Próximo "no han afectado a la producción de petróleo y apenas a la de gas natural", con subidas medias de unos 6 dólares por barril de Brent y 10 euros por megavatio hora del gas en Europa, la extensión de la guerra podría desembocar en el bloqueo de corredores clave como el estrecho de Ormuz, situado entre el golfo de Omán y el golfo Pérsico, por donde circula alrededor de un 20% de la oferta mundial de petróleo y un 25% del gas natural licuado (GNL).

Esto tendría un impacto directo en las importaciones energéticas que realizan la UE y España desde Oriente Próximo, que suponen alrededor de un 10% del total, y los efectos "se harían sentir a través de un aumento de los precios de esas materias primas energéticas, en particular del petróleo, cuyo mercado está más integrado globalmente".

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios