Los ingresos de Vodafone España cayeron un 1,8% en el primer semestre de su año fiscal (abril-septiembre), hasta los 1.929 millones de euros, debido a la menor facturación por servicios, según los resultados presentados por la operadora este martes.
En ese sentido, los ingresos por servicio de Vodafone alcanzaron los 1.731 millones de euros (-2,8%) debido a la elevada competencia en el segmento 'low-cost' de consumo, por una menor base de clientes y por la reducción de las tarifas de terminación móvil, parcialmente compensadas por el crecimiento de los servicios digitales para empresas y por la actualización de planes de precios con el IPC. De este modo, los ingresos por servicio de Vodafone España supusieron el 9% del total de la facturación del grupo por este segmento de actividad en la primera mitad de su año fiscal.
Asimismo, la compañía ha registrado un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de 394 millones de euros en la primera mitad de su ejercicio fiscal, un 11,46% menos en comparación con los 445 millones de euros del mismo periodo del año pasado.
Las cifras del Ebitda reflejan un impacto de 4,1 puntos porcentuales debido a los beneficios fiscales extraordinarios del año anterior y de 2,9 puntos porcentuales por el aumento de los costes energéticos, parcialmente compensados por ahorros de costes comerciales y de interconexión.
Además, el margen Ebitda se redujo en 2,2 puntos porcentuales, hasta el 20,4%, frente al 22,6% del mismo periodo del ejercicio anterior.
Evolución de clientes
Vodafone puso en revisión estratégica su negocio en España, el cual ha sido adquirido recientemente por el fondo británico Zegona por 5.000 millones de euros, si bien la operación todavía está pendiente de las aprobaciones regulatorias pertinentes.
En este contexto, los resultados comerciales de Vodafone en España mejoraron en la primera mitad de su ejercicio fiscal debido a las medidas puestas en marcha por la empresa, como el refuerzo en las tarifas convergentes en septiembre, una mejor gestión de la base de clientes o la recuperación de la inversión publicitaria, entre otras iniciativas.
En el segundo trimestre (julio-septiembre), la base de clientes de contrato móvil de Vodafone en España aumentó en 78.000, hasta un total de 13,9 millones, debido a las acciones comerciales de captación acometidas por la compañía. En tanto, los clientes de banda ancha fija se redujeron en 20.000, hasta 2,8 millones, y la base de clientes de televisión menguó en 16.000, hasta 1,4 millones. Asimismo, la base de líneas activas de internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés) alcanzó los 6,1 millones.
Además, la base de clientes móviles de contrato de Lowi se incrementó en 19.000 debido principalmente a la inclusión del 5G en las tarifas y de velocidades hasta 1 gigabit por segundo (Gbps) en fibra, aunque siguió impactada por la intensidad competitiva del 'ultralowcost'. En ese sentido, a principios del primer trimestre de su ejercicio fiscal, Vodafone cerró el 15% de las tiendas minoristas en España y no se renovaron varios contratos de distribuidores para aumentar la eficiencia del canal.