Primeras señales de pánico en los mercados. Las correcciones en los resultados empresariales de EEUU respecto a lo esperado por el consenso de analistas, ha inundado de miedo a los mercados. Gigantes tecnológicos como Intel sufren correcciones del 30% y si EEUU se resfría, la neumonía llega a los mercados asiáticos. Y así ha sido.
El principal índice de la bolsa de Tokio, el Nikkei, se desplomó un 12,4% este lunes, la segunda mayor caída porcentual de su historia, arrastrado por dos factores. El miedo a que EEUU entre en recesión y, en consecuencia, al fortalecimiento del Yen frente al dólar, fomentado a su vez por la última subida de tipos del Banco de Japón.
En Corea ha sucedido lo mismo. El principal indicador de la Bolsa de Seúl, el Kospi, muy monitorizado por los creyentes en el crecimiento infinito de la tecnología, cayó este lunes un 8,77%. El motivo, el mismo: temor a que EEUU entre en recesión. El referencial surcoreano perdió 234,64 unidades hasta situarse en 2.441,55 enteros, mientras que el índice tecnológico Kosdaq cedió 88,05 unidades, o un 11,3 %, hasta quedar en 691,28 puntos.
En Japón, por su parte, el Nikkei, que agrupa a los 225 títulos más representativos del mercado, cerró con un descenso del 12,40 % o 4.451,28 puntos, hasta los 31.458,42 enteros. El Topix, que incluye a las firmas de la sección principal, las de mayor capitalización, retrocedió un similar 12,23 % o 310,45 puntos, hasta las 2.227,15 unidades.
De esta forma, el Nikkei encajó su mayor descenso porcentual desde el "Black Monday" (lunes negro), el 20 de octubre de 1987, cuando se depreció un 14,90 %, y también su mayor caída en puntos de la historia, al sobrepasar los 3.836,48, también de ese día.
El índice alcanzó los 42.426,77 puntos el pasado 11 de julio y marcó entonces su récord histórico, espoleado por la continuada depreciación del yen. Desde entonces, el selectivo referencial acumula una caída del 25,5 %, y 10.765,60 puntos.
El cambio en la política monetaria nipona amplificó el efecto de los temores a una desaceleración económica en EE. UU. tras unos datos de empleo mucho peor de lo esperado que desataron las especulaciones de un aumento del ritmo del recorte de tipos de interés en el país norteamericano, lo que deparó fuertes caídas también en otras bolsas asiáticas en este inicio de semana.
La citada subida de tipos del BoJ, que reduce las diferencias entre esta entidad y otras como la Reserva Federal estadounidense y el Banco Central Europeo, desencadenó una fuerte apreciación del yen frente al euro y al dólar, una tendencia que perjudica a los grandes exportadores nipones al repatriar sus beneficios en el exterior.
El yen se movía hoy durante las negociaciones en Tokio entre los 141,68 y los 146,63 yenes por dólar. Frente al euro, la divisa japonesa se apreció también y se movía en la franja de las 154,39 y las 160,13 unidades.