Michael Burry es una figura legendaria en el mundo de las finanzas, famoso por descubrir el problema con las hipotecas en EEUU en la crisis inmobiliaria de 2008. Burry, fundador de Scion Capital LLC, fue uno de los primeros en identificar y apostar en contra del mercado hipotecario que, por entonces, gozaba de todos los parabienes de la industria y se consideraba un activo extraordinariamente seguro, bendecido por la triple A de calidad de riesgo de las distintas agencias de calificación. El tiempo tardó algo en darle la razón y mientras lo hacía, muchos le consideraron un loco. Ahora es un genio, un gurú. Su historia fue inmortalizada en el libro The Big Short de Michael Lewis, y posteriormente en la película del mismo nombre, reseñada en libertad digital.
La nueva jugada: oro físico
Por sus méritos durante la crisis subprime Burry se ha convertido en un gurú y el mercado estudia siempre sus movimientos. Y el último tampoco ha dejado indiferente a buena parte de quienes le siguen. El pasado 4 de agosto, en un contexto de caídas significativas en la bolsa, Michael Burry añadía un 7,3% de oro físico a su cartera a través del Physical Gold Trust.
Michael Burry ha añadido a su cartera un 7,3% de oro físico, a través del Sprott Physical Gold Trust https://t.co/kSCPipAIwt
— Marta Escribano (@MartaEscribanoL) August 5, 2024
Tradicionalmente, el oro ha sido visto como un refugio seguro en momentos de volatilidad del mercado y crisis financieras. La reciente caída en los mercados podría ser un indicativo de futuras turbulencias económicas, y Michael Burry parece estar anticipando estos movimientos. Para Burry, es evidente que el oro será uno de los activos ganadores de los próximos años.
Tiempos convulsos
La economía global parece haber entrado en un periodo de mayor volatilidad, con fluctuaciones significativas en los mercados financieros, tensiones geopolíticas y cambios en las políticas monetarias. El oro ha sido históricamente un resguardo contra la incertidumbre y la pérdida de confianza en las monedas fiduciarias.
En los últimos años, el oro ha mostrado una tendencia alcista significativa. Desde principios de 2024, el precio del oro ha aumentado aproximadamente un 16.86%, alcanzando máximos históricos. A principios de año, el precio del oro era de $2,064.75 por onza. Este mes de agosto de 2024, se mueve alrededor de $2,454.77 por onza.
En 2023, la cotización del oro comenzó el año en torno a los $1,800 por onza y cerró en un récord de $2,078.40 por onza al final del año.