
La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) ha otorgado su aprobación al folleto presentado por Iberdrola para la adquisición del 18,4% que aún no controla de su filial estadounidense Avangrid. Esta operación, valorada en 2.551 millones de dólares (aproximadamente 2.348 millones de euros), permitirá a Iberdrola consolidar su control total sobre Avangrid, una pieza clave en su estrategia de expansión en Estados Unidos.
Como parte del proceso de fusión, Avangrid ha convocado su junta general de accionistas para el próximo 26 de septiembre en Boston, Massachusetts. En esta reunión, los accionistas votarán sobre el acuerdo de fusión. El comité especial de Avangrid, compuesto por consejeros independientes, ha respaldado la operación, señalando que es justa para los accionistas minoritarios. Además, el banco de inversión Moelis, contratado por el comité, ha confirmado la equidad de la transacción desde un punto de vista financiero.
Por su parte, Morgan Stanley, asesor financiero de Iberdrola, ha concluido que el acuerdo es justo para la matriz española. Según los términos acordados, Iberdrola pagará 35,75 dólares por acción, una mejora respecto a la oferta inicial de 34,25 dólares, lo que refleja la valoración ajustada de Avangrid. Tras la finalización de la operación, Iberdrola solicitará la exclusión de las acciones de Avangrid de la Bolsa de Nueva York, consolidando así su control total sobre la empresa.
En cuanto a los dividendos, Avangrid continuará distribuyéndolos conforme a su política habitual hasta que la fusión se complete. La filial de Iberdrola en EE.UU. seguirá pagando dividendos trimestrales, no superiores a 0,440 dólares por acción, incluido un dividendo proporcional al trimestre incompleto en el que se cierre la operación.
Además de la aprobación por parte de la SEC, la operación está pendiente de recibir el visto bueno de la Comisión Federal Reguladora de Energía, la Comisión de Empresas de Servicio Público de Maine y la Comisión de Servicio Público de Nueva York. Estas aprobaciones son necesarias para que la transacción pueda finalizarse, posiblemente durante el último trimestre del año.
Esta integración es estratégica para Iberdrola, ya que incrementa su exposición al negocio de redes en Estados Unidos, un mercado clave con alta calificación crediticia y fuertes oportunidades de crecimiento en actividades reguladas. Avangrid, con sede en Connecticut, gestiona activos valorados en 44.000 millones de dólares y opera en 24 estados, destacándose en los sectores de redes eléctricas y energías renovables. Esta expansión refuerza la posición de Iberdrola como un líder global en el sector energético, especialmente en mercados que apuestan por la transición hacia fuentes de energía más sostenibles.
La energética española, que cotiza en máximos históricos, refuerza así su posición en uno de los mercados más importantes del mundo, con una capitalización que supera los 80.000 millones de euros, un valor superior a la suma del resto de las compañías del sector en el IBEX 35. La consolidación de Avangrid permitirá a Iberdrola optimizar sus operaciones y reforzar su liderazgo en la transición energética global.