Pedro Sánchez no deja de alardear de su supuesto "cohete" económico. Pero toda una red de amaños estadísticos soporta un trampantojo que se ceba de manera muy especial en el mercado laboral. Lo cierto es que el número de supuestos empleados -así figuran en el sistema estadístico, especialmente por el mecanismo del empleo fijo discontinuo- que busca un puesto de trabajo real se eleva ya a casi un millón de personas tras una subida en el mes de julio de nada menos que 171.381 afectados.
Los estudios han sido elaborados por los expertos del sindicato USO en base a los datos oficiales. Simplemente han cuantificado los empleos reales, los parciales, las horas realmente trabajadas, los demandantes de empleo de cada colectivo, las personas en formación, etc. Traducido: sin más, han eliminado los efectos ópticos de una estadística cada vez más repleta de engaños y menos de transparencia. Y las conclusiones son opuestas a las del Gobierno.
"El número de desempleados registrados en las Oficinas de los Servicios Públicos de Empleo, al finalizar el mes de julio, ha bajado en 10.830 personas en relación con el mes anterior". Totalmente cierto. Pero, para empezar. "en términos desestacionalizados, el paro registrado baja en 12.378 personas. Hay un descenso ligeramente inferior al producido el año pasado". "¿Se esta frenando el mercado laboral, tal y como anticipo la reciente EPA?", se pregunta el departamento de estudios de USO.
El detalle de los datos oficiales responde a esta pregunta: "El número total de desempleados ("personas que no trabajan o que no están ocupadas") registrados en los Servicios Públicos de Empleo alcanza los 3.089.167. Estos se distribuyen en parados registrados: 2.550.237; otros no ocupados (en formación): 195.049; y con disposición limitada o demanda de empleo específico: 343.881. Además, podríamos añadir los 8.687 trabajadores que al finalizar el mes estaban en un ERTE".
Bien, pues de todos estos, el Gobierno sólo reconoce a los parados registrados oficialmente como tales: 2.550.237.
Sigamos. "No están tampoco contabilizados en el total de parados los demandantes de empleo con relación laboral (en los que se incluyen fijos discontinuos inactivos), que un mes más no se desglosan por parte del SEPE y que están incluidos en los demandantes de empleo ocupados (aunque estén inactivos, es decir parados)", alerta USO. ¿Y cuántos suman? "Estos últimos han aumentado en julio en 171.381. Ello nos llevaría, con una estimación de 900.000 inactivos que están en disposición de trabajar, como hace la última EPA, a un total de personas desempleadas en el entorno de los 3,6 millones", detallan los expertos del sindicato. 1,1 millones de personas por encima de la cifra de parados de la que alardea el Gobierno. Todo un señor trampantojo. O todo un ejemplo de estadística manipulada y hasta narcótica.
Y es que, "si analizamos la variación interanual del número de parados vemos como la producida entre junio de 2023 y 2024 es la peor (menor) de los últimos 11 años, exceptuando 2019 y 2020, dato afectado directamente por la pandemia", añade USO.
Es más, cualitativamente los datos tampoco pasan la prueba del optimismo político habitual: "En julio de 2024 se han registrado 589.007 contratos de trabajo de carácter indefinido, que representan el 38,71% de todos los contratos cuando en junio este porcentaje fue del 41,15 y en mayo del 43%". Y, "en magnitudes acumuladas, se han realizado 3.827.186 contratos por tiempo indefinido hasta julio de 2024, representando un descenso de 165.634 (-4,15%) sobre el mismo periodo de 2023".
"En términos acumulados, los contratos indefinidos a tiempo completo alcanzan de enero a julio de este ejercicio un total de 1.632.153, con una disminución de 56.852 (-3,37%) frente al mismo periodo del año 2023. Y los contratos indefinidos a tiempo parcial suponen un total de 900.208, registrando una reducción de 15.023 (-1,64%) en relación al mismo periodo del año anterior", concluye.