La Unión Europea rebajará el estatus de protección del lobo tras analizar los datos de población de la especie y escuchar a los ganaderos afectados por los ataques del depredador. Este miércoles, los Estados miembros han apoyado la propuesta de la Comisión para relajar las normas de gestión de esta especie, sin comprometer la protección de la especie. Sólo dos países han votado en contra: Irlanda y España. Por eso, a pesar del resultado de la votación, los ganaderos temen que el Gobierno de Pedro Sánchez haga oídos sordos porque cada estado será soberano para decidir cómo gestionar la especie.
En concreto, el responsable de Asaja en Bruselas, José María Castilla, ha señalado en declaraciones a Europa Press que están "muy satisfechos" con el resultado de la votación. También esperan que se mantenga esa mayoría para cambiar el estatus del lobo en la Declaración de Berna y en la directiva Habitats. Aún así, ha indicado que si el Gobierno español "quiere seguir prohibiendo la actividad cinegética, podrá hacerlo". A su vez, ha denunciado la actitud de "abandono" hacia los ganaderos de Teresa Ribera, a la que no le ha augurado "un buen futuro" como comisaria europea si sigue "en ese camino".
Para el portavoz Lobo y Ganadería Extensiva de COAG, Gaspar Anabitarte, había que reconocer que las medidas de protección para con el lobo "han funcionado" y había que situar al animal "en el estatus que lógicamente le corresponde" ya que "no está en la situación en la que estaba en su momento". En declaraciones a Europa Press, el portavoz ha puesto en duda que esta votación "se traduzca en medidas que el Gobierno español" quiera tomar cuando lo que hace la UE es "obligar a unos mínimos de protección" y España está "en máximos".
Por su parte, el jefe de Prensa de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, Diego Juste Conesa, ha celebrado el resultado de la votación como "una buena noticia" y ha señalado que adapta el grado de protección del lobo "a la realidad de la especie, que no es tal y como muchos están diciendo de peligro de extinción". Sobre España, ha indicado que el hecho de que el país haya votado en contra es un "empecinamiento" sobre este asunto por parte del Ministerio de Transición Ecológica de Ribera y ha lamentado que el Ministerio "no recapacite sobre este posicionamiento y escuche a las personas que viven en los pueblos".
En la misma línea que los ganaderos, la Real Federación Española de Caza (RFEC) ha valorado "muy positivamente" el resultado de la votación y ha lamentado que el Gobierno español haya sido "el único país que con población estable de lobos" que se haya manifestado en contra. Una vez flexibilizado el estatus de protección del lobo en los países europeos, la RFEC espera que el Ejecutivo "escuche a Europa", saque al lobo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESPRE) y ponga en marcha un plan de gestión de la especie.