
El Ministerio de Sanidad ultima la modificación de la Ley 28/2005, que regula las medidas sanitarias frente al tabaquismo, así como la venta, el suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco. Asimismo, el departamento de gobierno ha puesto en marcha la actualización Plan Integral de Prevención y Control de Tabaquismo. y se ha mostrado a favor del empaquetado genérico y de la prohibición de los aditivos en el tabaco y otros productos relacionados.
Sanidad asegura que el tabaquismo es la primera causa de mortalidad y morbilidad evitable en España. Es importante destacar, sin embargo, que el consumo del tabaco está disminuyendo en todo el mundo - y nuestro país no es ninguna excepción. Si bien más de un 30% de la población española consume productos de tabaco de forma diaria, la prevalencia de este hábito ha caído casi 10 puntos con respecto a los registros que se daban a comienzos de siglo.
El Ejecutivo que preside Pedro Sánchez aspira a lograr mejores resultados a base de reforzar las prohibiciones y restricciones normativas que afectan al sector. Acabar con los distintos sabores ofrecidos en el ámbito de los cigarrillos electrónicos es una de las metas que se han fijado en el Ministerio de Sanidad. Estas prácticas normativas van contra la evidencia disponible, que muestra cómo otros países han logrado reducir el consumo de tabaco convencional apoyándose en el vapeo como puerta de salida para los fumadores que necesitan una alternativa menos dañina para así dejar atrás este hábito.
A nivel global, Japón emerge como un ejemplo de este tipo de regulación, pero no hace falta irnos a Asia para comprobar la mayor efectividad de los modelos de regulación inteligente, puesto que, en el seno de la Unión Europea, tenemos el caso de Suecia, otro país que ha evitado evitado la línea prohibicionista y, gracias a su apuesta por una mayor flexibilidad, ha alcanzado el hito de ser el primer país "libre de humo", con una prevalencia de dicho hábito inferior al 5%.
Así lo pone de manifiesto un estudio del think tank Foro Regulación Inteligente (FRI), en el que se explica cómo las autoridades del país escandinavo han evitado imponer prohibiciones a productos alternativos como el vapeo para así ofrecer una salida a los fumadores habituales y canalizar también hacia este segmento a quienes empiezan a desarrollar este hábito.
Los resultados muestran que, en su conjunto, el consumo de tabaco se ha reducido drásticamente y que, además, el peso relativo del vapeo ha ido a más, de modo que hay menos gente fumando y, entre quienes fuman, menos personas consumiendo tabaco al uso. Según detalla el documento de FRI al que ha tenido acceso este diario, el modelo sueco pivota sobre tres pilares:
- Accesibilidad. Por un lado, en lo referente a puntos de venta. En Suecia existe una amplia y creciente variedad de productos de nicotina alternativos (incluidos los cigarrillos electrónicos, las bolsitas de nicotina, el snus y los productos de tabaco para calentar) que están disponibles en los mismos puntos de venta que los cigarrillos, incluidos los comercios minoristas y los canales online. Por otro, en lo referente a la información, la regulación aplicada permite proporcionar información suficiente y de calidad en el punto de venta, controlando que ésta vaya dirigida exclusivamente a adultos, protegiendo así a los jóvenes. Por ejemplo, en el caso de las bolsitas de nicotina, que son el producto alternativo a la nicotina de adopción más reciente, se han cerrado acuerdos voluntarios sobre las advertencias sanitarias y su ubicación en puntos de venta.
- Aceptabilidad. Una encuesta realizada entre los ex fumadores suecos indica que la variedad de sabores y de niveles de nicotina es una cuestión muy importante a la hora de elegir un producto de nicotina alternativo al cigarrillo convencional. En concreto, el 89% destacó la importancia de los sabores y el 75% citó los niveles de nicotina. Por ello, los sabores están permitidos en todos los productos alternativos a la nicotina, pero prohibidos en los cigarrillos
- Asequibilidad. Más de más de la mitad de los ex fumadores suecos (61%) creen que mantener los productos alternativos de nicotina más asequibles que los cigarrillos fue un factor clave para el éxito de su proceso de deshabituación. Por ello, el modelo tributario sueco de impuestos sobre el tabaco y la nicotina está estructurado para gravar los productos en función de sus niveles de riesgo relativo, con impuestos sustancialmente inferiores para los productos de nicotina sin combustión, estableciendo así el enfoque gradual que permite avanzar hacia la reducción de daño.