
Nueva vuelta de tuerca de los comunistas. No sólo es que Valencia haya sufrido la decisión política de no limpiar las cuencas y dejar asilvestrados los barrancos. No sólo es que haya pagado con vidas y destrozo el parón de las obras hídricas porque se ha implantado el ecologismo más radical. Ni siquiera que no haya recibido las ayudas prometidas para las víctimas de las inundaciones. Es que, para colmo, partidos como Sumar siguen empeñados en el mismo esquema. Sumar, de hecho, acaba de exigir garantías de blindaje y de paralización de obras en otro acuífero.
En este caso se trata de la "despensa de Málaga" que "se encuentra en las zonas de producción agrícola del Valle del Guadalhorce donde destacan las producciones de Coín". Allí, los comunistas, que no han dejado de limitar la actividad agrícola, acaban de invocar lo contrario —la protección de la agricultura— para bloquear explotaciones en ese área: "En torno a la actividad agrícola ha pervivido una red de municipios y una cultura agrícola de saberes ancestrales que hoy está en peligro".
El debate se centra, en concreto, en "el acuífero de Sierra Blanca, compuesto por los acuíferos occidentales de Istán, Ojén y Marbella en su sector oriental, y por el acuífero de Coín en su sector occidental" que, según Sumar, "está amenazado por la sobreexplotación y por macroproyectos urbanísticos incompatibles con su supervivencia".
"Gran valor ambiental"
"Estos recursos hídricos dotan a la zona de gran valor ambiental y paisajístico, así como permiten diversos usos del suelo. El principal uso del suelo en la comarca es el agrícola con predominio de cultivos de regadío de porte leñoso, fundamentalmente cítricos y frutales", recuerda ahora el mismo partido que carga contra el consumo de agua de los regadíos. "Los cultivos de olivar aparecen relegados a las zonas de mayor pendiente y menor productividad. También son destacables los usos recreativos del suelo. Prueba de ello son el agroturismo, las rutas gastronómicas, el senderismo y actividades deportivas como la bicicleta, el vuelo libre, el piragüismo, la ornitología que se desarrollan en el entorno", añaden los comunistas.
"Esta biodiversidad, estos paisajes y los usos del suelo que permiten el arraigo al territorio de las poblaciones del Guadalhorce dependen de la preservación de los recursos hídricos que proporciona el acuífero de Sierra Blanca que hoy está amenazado", asegura Sumar.
Y, afirma el partido de Yolanda Díaz, "es así porque la Junta de Andalucía está impulsando como inversión de interés estratégico el proyecto de empresa Nature Call Initiatives para construir un complejo turístico, deportivo y de ocio en un enclave situado sobre el acuífero que abastece a la población y las huertas de Coín".
"Protección de aguas"
Y, con esos argumentos, Sumar exige al Gobierno que, "en el marco de las competencias estatales y en aplicación de la normativa interna y europea sobre protección de aguas como la DMA 2000/60/CE, adopte las medidas necesarias para evitar la instalación del complejo urbanístico impulsado por Nature Call Iniciatives sobre el acuífero de Sierra Blanca (Málaga)". Que "la Confederación Hidrográfica del Sur emita un informe sobre la afectación en la calidad del agua y en el suministro para uso humano y agrícola que pudiera derivarse de la ejecución del proyecto urbanístico de Nature Call Iniciatives. Y que el Gobierno de Sánchez "adopte todas las medidas oportunas para la adecuada protección de la Masa de Agua Subterránea Sierra Blanca, garantizando el caudal, la calidad del agua y la preservación medioambiental de la zona".