
La consejera de Economía y Finanzas de la Generalidad de Cataluña, Alícia Romero, y el secretario de Estado de Hacienda, Jesús Gascón, presiden este viernes la reunión de la comisión mixta de asuntos económicos y fiscales que tiene como objetivo el lanzamiento de la Agencia Tributaria de Cataluña a los efectos de que participe en la campaña de la renta de 2024. Este es el primer paso para la implantación del modelo de concierto económico catalán que el PSC y ERC pactaron para la investidura de Salvador Illa.
La "financiación singular" de Cataluña, tal como la definen los socialistas, arrancará involucrando a la hacienda catalana en la gestión y recaudación del IRPF, para lo cual el gobierno autonómico prevé la contratación de noventa inspectores y técnicos tributarios y 102 funcionarios que se incorporarán a la Agencia Tributaria de Cataluña, cuya plantilla actual es de ochocientos empleados. La intención de la Generalidad es llegar hasta los cuatro mil funcionarios para hacerse cargo definitivamente de la campaña de la renta en el próximo ejercicio.
A estas contrataciones se debe añadir la creación de 87 puestos de atención tributaria desplegados por todo el territorio catalán para facilitar la gestión y recaudación del IRPF en lo que pretende ser un ensayo a pequeña escala del despliegue fiscal de la Generalidad para sustituir a la Agencia Tributaria del Estado.
En la reunión entre el Gobierno y la Generalidad de este viernes se estudia también el procedimiento técnico para la condonación de 17.104 millones de la deuda catalana con el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), en este caso en cumplimiento del acuerdo con ERC para la investidura de Pedro Sánchez.
Otro de los asuntos de la agenda es la ampliación de la plantilla de los Mossos hasta los 25.000 efectivos en 2030. Al respecto, Gobierno y Generalidad debaten sobre las partidas estatales necesarias para la ampliación de la plantilla de la policía autonómica. La guinda de la reunión es una ampliación de crédito de 4.000 millones para que el Govern pueda asumir todas sus promesas con los separatistas a falta de presupuestos autonómicos.