Pedro Sánchez se prepara para las exigencia de la cumbre de la OTAN en junio. La reunión parece que puede deslizar una petición de aumento del gasto militar hasta la órbita del 3-3,5% del PIB. Y todo ello mientras los socios parlamentarios del PSOE son reacios incluso a aceptar una subida al 2%. Cada punto del PIB son 16.000 millones de euros y Sánchez es incapaz de sacar unos presupuestos que soporten semejante alteración financiera. Resultado: ERC ha empezado a buscar un punto de acuerdo de forma que, al menos, Sánchez, satisfaga parte de la exigencias que pueden contestar al resto de partidos que lo apuntalan. La idea de ERC, que ya estudia el PSOE, pasa por una nueva batería de impuestos ecológicos. Llega el saqueo fiscal verde.
ERC ha plasmado ya su exigencia por escrito: "Acelerar la implantación de una fiscalidad verde que acerque al Estado a la media europea de recaudación, impulsando, en concreto, impuestos al queroseno a nivel europeo y a los vuelos frecuentes a escala estatal". Todo un golpe a los desplazamientos y al turismo. Pero eso para ERC, por lo visto, es lo de menos. La historia pasaría por introducir el tema ecologista en la ecuación cie modo que, si hay que aceptar más gasto en Defensa, al menos se pueda responder con una subida de impuestos por motivos 2030. Y a la izquierda lo de subir impuestos le encanta. Y si es argumentando que con ello se salva el planeta, aún más.
Lo cierto es que esas subidas supondrían todo un mar sobre otro océano de impuestos disparados o creados en la Administración Sánchez.
Desde que Sánchez llegó al poder, el Instituto Juan de Mariana ha enumerado en su ‘Impuestómetro' -el informe "dedicado al estudio de la onerosa carga fiscal que soportan los contribuyentes españoles"- un total de 94 subidas de impuestos hasta el cierre de 2024. El PP, por su parte, ha elevado esa cifra hasta las 97 subidas al incorporar las tres últimas subidas de cotizaciones que el 'Impuestómetro' no había podido computar aún.
En resumen, casi cien subidas de impuestos que van desde las cotizaciones sociales, el IRPF, Sociedades, impuestos a la energía, luz, plástico, catastrazos, primas de seguro, etc. Básicamente, una era de saqueo fiscal sin fin y con normas racimo. Porque no han dejado un impuesto sin elevar.
Por eso ahora hablan de crearlos nuevos y bajo el argumento de la Agenda 2030, que, deben pensar, todo lo justifica.
Si se compara el nivel de extracción de impuestos de 2018 con el de 2024, lo cierto es que la recaudación de impuestos se ha disparado en una locura de más de 140.000 millones de euros.
Así, el IRPF de 2024 cerró en una recaudación de 129.408 millones, frente a los 82.859 millones de 2018: 46.549 millones de subida fiscal, un 56,2% más.
El tipo medio de IRPF ha pasado del 12,1% (2015) al 14,4% (2024). Las cotizaciones sociales han escalado en ese mismo periodo en más de 50.000 millones (43,5% más).
Y sólo en los dos primeros meses (enero-febrero) de 2025 -en comparación con 2024- los impuestos han crecido en 4.000 millones y las cotizaciones sociales lo han hecho en 1.981 millones, generando un incremento en la recaudación total de cerca de 6.000 millones.
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